
El programa griego entra en una fase crucial con la primera revisión del tercer paquete de rescate. Para preparar el terreno, el comisario de Economía, Pierre Moscovici, aprovechó el foro de Davos para reunirse ayer por la tarde con el primer ministro griego, Alexis Tsipras. En una entrevista con elEconomista en los márgenes del foro mundial, Moscovici subraya que Atenas debe ser más ambicioso con la reforma de las pensiones.
Y mientras mantiene su optimismo respecto a la economía europea, advierte que en el caso español el Gobierno que llegue al poder se encontrará con la demanda de más ajustes sobre la mesa.
El mensaje de la Comisión para España es que el país necesita un Gobierno estable para continuar con las reformas. ¿Cómo conseguirlo?
Respetamos el voto de los españoles. Con un gobierno en funciones, hay dificultades para progresar con las reformas estructurales que se han pedido y con el ajuste fiscal que puede ser necesario. Seremos capaces de tratar estos asuntos importantes cuando haya un Gobierno estable. Una vez que se encuentre una solución, se tendrá que volver a la realidad y las reglas europeas. Lo que dijimos (respecto a los Presupuestos) todavía es válido en su conjunto, y esas exigencias continuarán gobierne quien gobierne.
Según su opinión, lo que España tiene que aplicar es un ajuste de al menos 5.000 millones de euros...
Lo discutiremos cuando tengamos la información definitiva.
¿Quiere decir que contempla mejorar las previsiones de crecimiento para España, lo que aliviaría el ajuste?
La necesidad de reformas estructurales y ajustes no desaparecerá cuando se encuentre una solución política en España. Pero también tenemos que ser cautos porque tenemos que integrar información por llegar. La economía española es testigo de una recuperación total con un crecimiento impresionante. La intención de la Comisión no es romper las condiciones de esta recuperación. Pero sabemos lo alto que es el desempleo en España. Y también, cuando atendemos a la situación fiscal, al déficit tanto nominal como estructural, que todavía hay ajustes por hacer.
Respecto a Grecia, el gran tema de discusión es la reciente reforma de pensiones que presentaron. ¿Está de acuerdo con su propuesta de evitar recortar las pensiones a cambio de subir las contribuciones?
Me reuní 15 minutos con el primer ministro Alexis Tsipras, lo que es una reunión larga para los estándares de Davos. Estamos intentando trabajar en lo que podría ser una aproximación global. No entramos en detalles. No nos corresponde a nosotros negociar los parámetros precisos de la reforma de las pensiones en este momento. Las autoridades griegas y sus socios europeos quieren construir una historia de éxito en Grecia, lo que implica aplicar el programa en su totalidad, con reformas sólidas que lleven a una conclusión de la primera revisión. De esta manera, podremos empezar el debate sobre el alivio de la deuda en buenas condiciones.
Pero el FMI quiere más tijera en las pensiones. ¿Está de acuerdo con esta aproximación?
No tuvimos una discusión técnica. Estamos en Davos, donde la gente se puede reunir en un ambiente más relajado para discutir asuntos globales, no los detalles. Espero que se den muy pronto las condiciones para que nuestros jefe de misión puedan regresar a Atenas. Tanto el primer ministro Tsipras como yo creemos que es preferible que se avance tan rápido como sea posible.
Dados los numerosos desafíos que encara Europa, ¿podrían ser los socios europeos más conciliadores en esta revisión, por ejemplo con las pensiones, para evitar volver al escenario de confrontación del año pasado?
Nosotros no tenemos que aliviar nuestras demandas. Tenemos una hoja de ruta, que es el memorando de entendimiento (basado en el acuerdo de julio). Y tenemos que cumplirlo, ni más ni menos. Pero también es cierto que el ambiente y las condiciones de trabajo, y las relaciones entre las dos partes han mejorado desde el pasado mes de julio. Si tuviera que resumir lo que dije al primer ministro Tsipras es que debemos mantener el momentum. Evitemos entrar en la atmósfera de drama o cualquier escenario de una salida de Grecia del euro. Estuvimos muy cerca de un Grexit el verano pasado. Lo evitamos. No queremos volver ahí. Por lo tanto, necesitamos una reforma de las pensiones ambiciosa.
Las bolsas están agitadas debido a los temores sobre China y el precio del petróleo. El ambiente en este foro económico también parece ser bastante pesimista. ¿Está justificado este pesimismo?
Desde luego que hay riesgos, pero creo que somos menos vulnerables que otras partes del mundo a una desaceleración de China. De momento, el clima no es desde luego optimista, pero no estamos regresando al escenario de 2007-2008. Aunque todo el mundo esté mirando a China, me he encontrado con muchos actores, sobre todo del sector privado, que confían bastante en que la transición china (hacia un nuevo modelo económico) no dañará a la economía global, y creen que el escenario de un aterrizaje suave de su economía es el más creíble.