Madrid, 30 mar (EFECOM).- El Banco de España prevé que el Producto Interior Bruto (PIB) crezca por encima del 3 por ciento entre 2008 y 2010, lo que obligará legalmente a las comunidades autónomas a presentar superávit en sus cuentas de estos ejercicios para cumplir la Ley General de Estabilidad Presupuestaria.
La institución hizo estas previsiones macroeconómicas plurianuales en respuesta a la petición del Ministerio de Economía y Hacienda de elaborar un informe, conforme a los establecidos en la citada ley, para acompañar la propuesta de objetivos de estabilidad presupuestaria del gobierno.
Los gobiernos regionales cuentan ahora con 15 días de plazo para enviar al Ministerio de Economía y Hacienda sus comentarios para que éste pueda formular su propuesta de objetivo de estabilidad presupuestaria para el conjunto de las comunidades autónomas ante el Consejo de Política Fiscal y Financiera.
Además, el documento del Banco de España prevé un crecimiento del PIB para 2007 del 3,4 por ciento, en línea con las últimas previsiones realizadas por el Gobierno en diciembre del año pasado, en el marco de una "ligera desaceleración" de la actividad económica ligada a la previsible subida de los tipos de interés.
El informe especifica que durante la primera mitad de este año el ritmo será mayor, debido a los "elementos de inercia" del último semestre de 2006 y que la segunda mitad del año se podría observar "cierta moderación en la expansión del producto, motivada por la pérdida de dinamismo del consumo privado y de la inversión".
En concreto, el Banco de España se refiere a la ralentización de la "inversión residencial", como consecuencia de la evolución de sus principales determinantes y, fundamentalmente, de las subidas de los tipos de interés que se han producido desde diciembre de 2006.
Además, el Banco de España "espera un reequilibrio en su composición, desde la óptica de la demanda" y afirma que la demanda nacional seguirá siendo el "principal motor del crecimiento" gracias al consumo privado y la inversión en equipo, un hecho que, según el informe, pone de relieve la "saneada" situación de las empresas y sus "favorables expectativas".
La contribución negativa del sector exterior al crecimiento del PIB se reducirá este año, según el Banco de España, por el mantenimiento de las condiciones favorables de 2006 y la recuperación de las principales economías de la Unión Europea, los principales mercados de la exportación española.
Aunque la financiación del déficit no presenta dificultades "dentro de la Unión Monetaria", el informe advierte de un creciente "recurso al endeudamiento", "que no puede aumentar indefinidamente al ritmo actual", algo que puede afectar a medio plazo al impulso interno.
En lo relativo al empleo, el documento augura para 2007 una disminución de la tasa de paro por debajo del 8 por ciento gracias a "la esperada moderación" en el empleo y "el menor avance esperado de la población activa".
Sobre los siguientes ejercicios económicos, la institución monetaria asegura que es probable que en 2008 "se produzca una desaceleración del PIB más marcada", aunque "todavía crecería a tasas superiores al 8 por ciento". La causa principal sería el enfriamiento del mercado inmobiliario en España.
El informe ahonda en este punto y explica que no percibe que, en las actuales condiciones financieras, "haya otros factores que puedan impulsar la inversión residencial con la intensidad que lo han hecho en los últimos años". EFECOM
jpm
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