Madrid
El precio del arroz en Japón se encareció un 101,7% interanual en mayo, la mayor subida registrada en toda la serie histórica, según datos del Ministerio del Interior nipón. De esta forma, continúa disparándose, tras registrar alzas del 98,4% en abril; del 92,1% en marzo; del 80,9% en febrero y del 70,9% en enero de 2025.
Hay que tener en cuenta que el arroz es un alimento básico en la dieta japonesa, por lo que el alza de precios ha tenido un impacto directo en la tasa de inflación de referencia, la que descuenta el impacto de la evolución de los precios de los alimentos frescos, que se situó en mayo en el 3,7%, dos décimas más que el mes anterior, y el nivel más alto desde enero de 2023.
El precio de los alimentos al margen de los productos frescos se elevó hasta el 7,7%, siete décimas más. Pero las presiones inflacionarias son generalizadas, con aumentos constantes de los precios de los alquileres, el transporte y el ocio, como advierten desde ING Research, en declaraciones recogidas por EP.
La esperanza es que la liberación de reservas de arroz por parte del Gobierno se haga sentir en los próximos meses. "Esto debería contribuir a reducir la inflación general", consideran los analistas.
Políticas comerciales de EEUU
En este sentido, recuerda que, en la reunión del Banco de Japón de la semana pasada, la institución pareció restar importancia al aumento de los precios, aunque "no está claro cuánto tiempo se reservará el Banco de Japón su opinión sobre la inflación, a pesar del reciente repunte de los precios subyacentes".
"Por ahora, le preocupa más el riesgo de que las políticas comerciales estadounidenses rompan el círculo virtuoso entre el crecimiento salarial y la inflación", por lo que la analista espera que la entidad será paciente con la inflación, lo que llevaría a implementar una subida de tipos de 25 puntos básicos en el cuarto trimestre, suponiendo que se concrete algún tipo de acuerdo comercial con Estados Unidos.
Un alimento básico
Hay que recordar que el arroz es un alimento básico en la dieta japonesa, y su precio ha ido escalando a la par que la inflación del país asiático, aunque en el último año el encarecimiento se ha disparado. Entre otros factores, detrás de esta escalada están las compras de pánico entre consumidores, unas terribles cosechas provocadas por las altas temperaturas, la especulación de los intermediarios o los efectos del turismo masivo, que han disparado la demanda de los restaurantes.
Tras 18 meses de alza, el precio medio del saco de 5 kilos de arroz se situó en 4.214 yenes (25,78 euros), lo que llevó al Ejecutivo a intervenir directamente los precios. Para intentar frenar la tendencia y estabilizar los precios, el Ejecutivo decidió de forma inédita liberar al mercado general a partir de marzo parte de su reserva del cereal mediante subasta para facilitar su distribución. En este sentido, Koizumi ha explicado hoy que están "liberando arroz almacenado a bajo precio porque necesitamos frenar la tendencia de la gente a abandonar el arroz de producción nacional".
Japón creó sus reservas nacionales de arroz en 1995, tras una grave escasez de arroz dos años antes, ante un verano inusualmente frío. Cada año, el Gobierno almacena unas 200.000 toneladas, para asegurar el suministro en caso de emergencia.
Esta situación actual, que ya se conoce como "la crisis del arroz", ha llevado a algunos hogares a reducir su consumo. Mientras que en algunos restaurantes del país, especialmente en las cadenas de bajo coste, se han visto obligadas a importar arroz de otros países.
El arroz es un alimento clave en la gastronomía japonesa, y hay quien lo consume en todas sus comidas, incluyendo hasta el desayuno. Además, apuestan decididamente por el producto local, donde varias prefecturas compiten por el título de mejor arroz local.