Como estaba previsto, el Pleno del Congreso ha convalidado esta mañana el Real Decreto-Ley (RDL) de medidas de respuesta a los aranceles norteamericanos, dotado con 14.100 millones de euros. Por 176 votos favorables frente a 169 negativos y cuatro abstenciones, este plan de relanzamiento comercial echa a andar gracias, sobre todo, al apoyo de los partidos independentistas Junts y ERC.
Los de Puigdemont argumentan que este es un plan "en el que están muy interesados" porque "Cataluña es una de las regiones de España que tiene más peso industrial". Previamente, el Gobierno se había comprometido a que el 25% de las ayudas del proyecto vayan a parar al tejido productivo catalán. De ahí, que el portavoz de Junts, Josep María Cruset, haya afirmado en el debate que "si se negocia con Junts con rigurosidad y se cumplen los acuerdos como ha hecho el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, Junts cumple sus acuerdos".
El RDL contempla una disposición pactada entre el Gobierno y Junts de "garantía de proporcionalidad territorial" en la aplicación de los fondos, por la cual se garantiza que la puesta a disposición de las empresas de los recursos se efectúe "con respeto al equilibrio territorial, sobre la base del porcentaje de las exportaciones de bienes con destino a Estados Unidos de las empresas de cada comunidad autónoma respecto al total de España en 2024 con particular atención a aquellas comunidades que tengan una mayor exposición".
La promesa de que Cataluña recibirá ese porcentaje fue el primero de los desencuentros entre el PP, que ha votado no a la convalidación, y el Gobierno y que llevaron a los primeros a romper en un primer momento las conversaciones que mantenían el ministro de Economía Carlos Cuerpo y el vicesecretario de Economía del PP Juan Bravo, encaminadas a lograr un acuerdo y el voto favorable de los populares al Real Decreto-Ley. Más tarde, el Partido Popular condicionó su apoyo a la prórroga de la vida útil de las centrales nucleares y la negativa del Ejecutivo rompió definitivamente las negociaciones. En la sesión de esta mañana, Juan Bravo ha añadido que el plan solo contiene "deuda, préstamos y avales".
A la formación de ERC, aunque ha votado que sí, también le parece que el RDL es incompleto y las "medidas son mínimas" y espera que, si más adelante se incluyen ayudas directas, éstas se condicionen al mantenimiento del empleo.
Las cuatro abstenciones provienen de Podemos, que no ha querido oponerse pero que ve incoherente luchar contra la guerra comercial y luego "apoyar a Donald Trump apoyando el incremento del gasto militar". Este grupo ha pedido que se expropien las viviendas que están en manos en España de fondos norteamericanos.
El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha defendido que el RDL contiene "medidas positivas" para las empresas por lo que es difícil explicar por qué se vota que no" y ha terminado expresando que tiene "la mano tendida para la respuesta de más adelante, para las siguientes capas".
Medidas
El Plan hoy convalidado cuenta con una línea de avales ICO de 5.000 millones, 1.000 millones de financiación intermediada, la financiación del Fondo de Apoyo a la Inversión Industrial Productiva, y el plan MOVES, con incentivos a la adquisición de vehículos eléctricos y despliegue de infraestructura de recarga. El Consejo de Ministros ya aprobó el primer tramo de 1.000 millones de los avales ICO. Además, las empresas contarán en esta primera pata del plan con el mecanismo RED, que lo podrán activar los sectores más expuestos. Cuerpo también recordó que el plan incluye medidas para la internacionalización, con 200 millones del Fondo para la Internacionalización de la Empresa, e instrumentos adicionales, como los seguros de crédito a la exportación, provistos por CESTE. El decreto también contempla la orientación de 5.000 millones de euros del Plan de Recuperación para orientarlos a las necesidades de las empresas más afectadas por el conflicto.