El presidente de la Generalitat de Cataluña, Salvador Illa, ha presentado este jueves en Madrid su propuesta económica para los próximos cinco años que vertebrará a través de una inversión de 18.500 millones de euros en sectores estratégicos con el fin de que el territorio vuelva a liderar la economía española. En un acto celebrado en el céntrico Círculo de Bellas Artes, el socialista ha lanzado un mensaje de confianza y seguridad al tejido empresarial madrileño para que apuesten por Cataluña en esta nueva etapa, tras un 2024 en el que la región creció por encima de la media del país y superó por primera vez la barrera de los 300.000 millones de euros de PIB.
El líder del Ejecutivo catalán ha detallado que harán "la movilización de recursos públicos más ambiciosa desde el año 2010" que irá destinada a infraestructuras, modernización productiva, conocimiento e innovación, igualdad de oportunidades y también, al buen gobierno. "Queremos hacer en cinco años lo que tendríamos que hacer en diez para modernizar nuestra economía" ha explicado Illa, que quiere pasar página de la etapa que dividió a la ciudadanía catalana en dos con el foco puesto en el impulso de la economía. Para ello, el presidente de la Generalitat ha defendido su "modelo de prosperidad compartida" entre territorios y entre grupos sociales, frente al de acumulación que abanderan otros gobiernos autonómicos.
El Govern engloba esta estrategia bajo el eslogan de 'Catalunya lidera' con el que persigue recuperar el músculo económico de la comunidad autónoma con los servicios públicos y el acceso a la vivienda en el centro. Illa ha hecho referencia a las diferentes transiciones (tecnológica, medioambiental, económica y geopolítica) para situar a Cataluña como pieza clave de la estrategia de España y también de Europa, frente a los riesgos internacionales y el avance de industrias como la Inteligencia Artificial y el desarrollo de los microprocesadores en las que Barcelona trata de hacerse un hueco o el ámbito de la movilidad sostenible, en el que se ha marcado el reto de hacer 150.000 matriculaciones de vehículos eléctricos en estos cinco años.
En este marco y con el reto de negociar las Cuentas Públicas para este y los próximos ejercicios por delante, Illa busca dirigir la inversión pública a modernizar la industria con el impulso de la agricultura, la automoción, el sector digital, la energía renovable, las industrias intensivas en energía como la química, la salud y el turismo como sectores prioritarios en esta hoja de ruta. También se marca la tarea de potenciar el crecimiento de las empresas para que alcancen un mayor tamaño y reunir 3.000 compañías emergentes para el año 2030 a partir de un presupuesto de 50 millones que se cubrirá a partir de la colaboración público-privada.
"Es el momento de apostar por Cataluña, porque es invertir en una España social que beneficia a todos los españoles, es invertir en seguridad, previsibilidad, confianza, rigor y valores democráticos" ha reclamado Illa tras destacar el papel que necesita que jueguen los inversores y las empresas privadas en esta etapa. El socialista ha destacado el regreso de las sedes sociales de Cementos Molins, Banco Sabadell, Criteria y la Fundación La Caixa como "uno de los logros más felices" de su gestión, por el impacto económico de estas decisiones y en especial, por el mensaje de seguridad jurídica que creen que transmite para que otros den los mismos pasos.
"Cuando Cataluña lidera, España avanza y Europa se fortalece". "Cuando Cataluña muestra todo su potencial ganamos todos y avanzamos todos, en un momento en el que necesitamos sumar todas las necesidades con Cataluña en primera línea" ha insistido el líder de la Generalitat, que también se ha referido al debate sobre fiscalidad con una crítica velada a la Comunidad de Madrid al defender que todos jueguen con las mismas reglas fiscales frente al denominado "dumping fiscal" con el que la capital beneficia a las grandes fortunas. Sin embargo, no ha hecho abordado el debate sobre la financiación singular acordada con ERC para su investidura.
Al evento han asistido referentes del mundo empresarial como los presidentes de BBVA, Carlos Torres, Repsol, Antonio Brufau, Redeia, Beatriz Corredor y Enagás, Antonio Llardén. Además, el exministro de Sanidad durante la pandemia ha estado arropado por diferentes miembros del Gobierno central como la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, o el titular de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños. En cambio, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, no ha asistido.