
El presidente valenciano Carlos Mazón ha defendido en el discurso institucional con motivo del 9 d'Octubre, la festividad de la Comunitat Valenciana, la igualdad entre las comunidades autónomas y el marco constitucional autonómico ante asuntos urgentes que considera "cuestiones de Estado" como la financiación autonómica.
En plena tormenta por el acuerdo singular para Cataluña pactado por Pedro Sánchez con ERC, Mazón advirtió que "lo que es de todos no puede gestionarse entre unos pocos". Como ya planteó en su reunión con el propio Pedro Sánchez la semana pasada, el presidente valenciano defiende que hay que ser pragmático y por ello se muestra dispuesto a hablar, pero con las mismas condiciones y en una misma mesa todos.
"Lo que es de todos se discute entre todos con luces y taquígrafos", repitió en su discurso institucional, donde además aseguró que "no caben privilegios, bulos ni chantajes" en estas cuestiones de Estado entre las que incluyó "la urgente actualización del modelo de financiación, el impulso a las infraestructuras o la redistribución de los recursos hídricos".
Pese a su rechazo al concierto catalán, el barón del PP también marcó cierta distancias con otros líderes regionales de su propio partido al dejar clara su disposición a negociar. "Hablar no es de cobardes, ni lo es ser pragmático cuando toca serlo", insistió, aunque también dejó claro que en esas conversaciones no pueden ser bilaterales como en el caso catalán. "El diálogo para encontrar las soluciones que podamos encontrar y acordar sólo puede tener un fondo: la igualdad de todos".
Mazón reivindicó el autogobierno valenciano como garantía de libertad y leyes, además de recordar que la Constitución y el Estatuto de Autonomía han generado un largo periodo de estabilidad, que desearían muchos territorios en el mundo. Y en esa línea también dejó claro que reivindicará los mismos derechos y competencias que cualquier otra CCAA.
"La Comunitat Valenciana es una nacionalidad histórica al mismo nivel que las otras que reconoce la Constitución, no somos una región de segunda que deba pleitesía a unos u otros o que tenga que pedir permiso o disculpas por ejercer las competencias que le son propias", aseveró el presidente valenciano en su intervención en el Palau de la Generalitat en Valencia.
"No existe ese voto de más que justifique la ruptura de un consenso amplio en torno a cuestiones centrales para el desarrollo económico y el progreso social". Por ello, consideró que "es imperativo que entre todos seamos capaces de recuperar esa generosidad y esa empatía en el debate de lo público. Es necesario regresar a las coordenadas donde mejor fluye la conversación democrática: la serenidad y el diálogo".
Acto central de la celebración
Al acto institucional por la festividad de la Comunitat Valenciana en la sede del Gobierno valenciano acudieron el presidente del Senado, Pedro Rollán, y la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, también secretaria general del PSPV-PSOE. Morant ejerció como líder de la oposición, y pidió al presidente popular "reivindicar y llorar menos" ante el Gobierno y "trabajar más" dentro de las competencias autonómicas que considera que "desatiende".
Además, también se entregaron las distinciones de la Generalitat Valenciana, con la que cada año se reconoce el trabajo y la labor de destacados alicantinos, castellonenses y valencianos, además de asociaciones y empresas. En nombre de los galardonados, el repostero alicantino Paco Torreblanca, fue el encargado de brindar el "postre" de los agradecimientos por unos reconocimientos que valoró especialmente por venir "de tu propio pueblo".
Torreblanca instó a mantener la que ha sido su máxima en la vida: "La cabeza en las estrellas y los pies en el suelo". Una receta para soñar con los mayores logres y "trabajar duro para conseguirlos". Por último, recordó que la Comunidad Valenciana "es una cuna de mucho talento que no debe dejarse desaprovechar" e instó a trabajar para que "el futuro de los jóvenes sea aún más dulce".