
Las empresas de la eurozona anticipan una ralentización en el crecimiento de los precios de venta y los salarios en los próximos 12 meses, según revela el Banco Central Europeo (BCE).
De acuerdo con los datos obtenidos en la encuesta sobre el acceso a la financiación de las empresas de la zona euro, se espera un aumento promedio del 3,3 % en los precios de venta y del 3,8 % en los salarios durante el próximo año. Esta proyección indica una moderación en comparación con periodos anteriores.
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) en España, el salario medio entre los ciudadanos es de 18.502 euros brutos anuales, el cual es percibido por 563.384 empleados. Por otro lado, el segundo salario más frecuente es de 16.487,2 euros al año, recibido por 560.327 trabajadores.
Cabe destacar que el año pasado, la subida promedio de los salarios negociados en la zona euro alcanzó el 4,47%, marcando un aumento significativo en comparación con el 2,92% registrado en 2022. Sin embargo, hubo una desaceleración en el último trimestre de 2023, donde el incremento interanual fue del 4,46%, descendiendo desde el máximo histórico del 4,69% observado en el trimestre anterior. Aunque este aumento trimestral es el segundo más alto en la serie histórica que se remonta a finales de 2005, representa la primera desaceleración desde mediados de 2022, coincidiendo con el inicio del ciclo de subidas de tipos de interés del BCE.
De hecho, la presidenta del BCE señaló el mes pasado que los datos confirmaban un proceso de desinflación en curso y se esperaba que este continúe descendiendo gradualmente a lo largo de 2024. Subrayó la importancia de evitar que este proceso se revierta, ya que ello sería contraproducente y requeriría tomar medidas adicionales. Destacó la necesidad de mantener la confianza en este proceso. Por otro lado, el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, enfatizaba también sobre la importancia de monitorear de cerca los factores de riesgo, incluyendo las presiones salariales que aún persisten a pesar de la desinflación en curso. En este sentido, el exministro español de Economía advirtió que el BCE no debe actuar prematuramente, ya que llevará tiempo confirmar si la inflación está regresando de manera sostenible al objetivo del 2%.
Restricciones a los préstamos bancarios
El informe también señala que las condiciones para obtener préstamos empresariales experimentaron una ligera restricción durante el primer trimestre de 2024. Sin embargo, este endurecimiento fue menos pronunciado en comparación con los últimos tres meses de 2023.
En el primer trimestre de 2024, se observó una disminución en el porcentaje de empresas que reportaron aumentos en los tipos de interés de los préstamos bancarios, con un 43% frente al 75% registrado en el trimestre anterior. Asimismo, el 37% de las compañías experimentaron aumentos en otros costes de financiación, como gastos, tasas y comisiones, en comparación con el 49% previo.
En cuanto a la necesidad de préstamos bancarios, solo un 1 % de las empresas indicó una disminución en el primer trimestre de 2024, en contraste con el 4 % que reportó aumentos en el trimestre anterior. Además, hubo una reducción en el porcentaje de empresas que percibieron una disminución en la disponibilidad de préstamos bancarios, pasando del 9% al 3%.
A pesar de estos datos, las empresas se mostraron optimistas sobre la disponibilidad de préstamos bancarios en los próximos tres meses. Sin embargo, destacaron que las perspectivas económicas son un factor crucial a considerar al buscar financiación. Este contexto sugiere una mejora en las condiciones financieras para las empresas en la eurozona, aunque la percepción de las condiciones económicas sigue siendo un elemento influyente en sus decisiones de financiación.
Igualmente, en este periodo, solo el 3% de las empresas reportó un aumento en su volumen de negocio, disminuyendo desde el 10% registrado previamente. A pesar de esto, estas empresas mostraron mayor optimismo sobre su evolución en los próximos tres meses. Por otro lado, un número mayor de empresas experimentó un deterioro en sus beneficios, enfrentando presiones de costos generalizadas. Además, las perspectivas de inflación de las empresas se moderaron, con proyecciones del 3,4 % para el próximo año y del 3 % en los próximos tres y cinco años.