
La negativa en el último momento del ex ministro de Consumo, Alberto Garzón, a formar parte del lobby de Pepe Blanco no deja a la entidad desprovista de ex altos cargos. Hasta nueve personalidades de la política española ocupan puestos importantes, donde destacan varios ex ministros de distintos signos políticos.
En los últimos cuatro años, la consultora ha contratado a políticos especializados en distintos ámbitos con la idea de poder abarcar las mayores esferas de influencia. De la rama socialista, Elena Valenciano, vicesecretaria general del partido con Alfredo Pérez Rubalcaba y cabeza de lista en las elecciones europeas de 2014, y Valeriano Gómez, exministro de Trabajo en el último Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, son los máximos exponentes.
Por parte del Partido Popular figuran Alfonso Alonso, exministro de Sanidad durante el Gobierno de Mariano Rajoy; Elena Pisonero, exsecretaria de Estado de Economía, Energía y Pyme con José María Aznar como presidente, o José María Lassalle, que fue secretario de Estado de Cultura y de Agenda Digital. Además, también aparecen Miguel Gamisans, que proviene de Esquerra Republicana y fue secretario de comunicación del Gobierno de Cataluña. Por otro lado, hasta el verano pasado, también figuraba Marco Candela, diputado, portavoz adjunto y presidente del Grupo Parlamentario de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid entre 2015 y 2019.
En los últimos tiempos, el lobby de Blanco ha sumado a dos nuevos ex dirigentes políticos. En la consultora han encontrado su sitio Guillermo Martínez, un histórico del Partido Popular que entre otros cargos fue exconsejero de Presidencia de Asturias. De hecho, Martínez fue el sustituto del socialista Antonio Hernando, que ayudó a Blanco a fundar Acento.
La última apuesta ha sido Rubén Moreno. El político valenciano, afiliado al Partido Popular, ocupó el cargo de Secretario General de Sanidad durante el primer Gobierno de Mariano Rajoy. Formó tandem con Alfonso Alonso en el Ministerio y fueron los artífices de la financiación de los medicamentos para la hepatitis C o de la gestión del virus del ébola.
Alberto Garzón iba a ser la última incorporación a Acento. Sin embargo, ayer anunció que renunciaba a su cargo como director de Prospectiva GeoPolítica.Estaba previsto que tomara las riendas del cargo para Semana Santa, aunque aun falta la aprobación de la Oficina de Conflicto de Intereses del Gobierno; pero no ha dado tiempo. "La decisión despertó un enorme revuelo en el ecosistema de izquierdas. La impresión general era que se trataba de una decisión que afectaría negativamente a las organizaciones del espacio político", explicó el ex ministro en su cuenta de X.