Alberto Garzón renuncia a su cargo en el lobby de Pepe Blanco antes de incorporarse. El exministro de Consumo anunciaba ayer mismo que entraba en Acento Public Affairs para tomar las riendas de la Dirección de Prospectiva GeoPolitica antes de Semana Santa.
Todavía quedaban ciertos flecos por cerrar, ya que la Oficina de Conflicto de Intereses del Gobierno tenía que dar el visto bueno. Sin embargo, Garzón no ha dado tiempo y ha decidido esta mañana renunciar a su puesto antes de formar parte de la consultora. "La decisión despertó un enorme revuelo en el ecosistema de izquierdas. La impresión general era que se trataba de una decisión que afectaría negativamente a las organizaciones del espacio político", señala el exministro en un comunicado publicado en su cuenta de X (antiguo Twitter).
Los motivos de Garzón detrás de esta decisión son claros. "No quiero que mi decisión personal perjudique a mis antiguos compañeros y compañeras de militancia en su necesaria misión de lograr el mejor resultado posible en las futuras convocatorias electorales", explica el exministro.
Tras la incomprensión suscitada en el espacio político, y con la intención expresa de no dañar a las organizaciones a las que tanto tiempo y energía he dedicado de mi vida, anuncio mi renuncia a incorporarme como tenía previsto.
— Alberto Garzón? (@agarzon) February 14, 2024
Esta es mi comunicación al respecto: pic.twitter.com/OLZutzBQkG
Además, reconoce que recibió varias ofertas de otras consultoras, pero "la de Acento encajaba muy bien en mi propósito. Podría asesorar a entidades de la sociedad civil en materias como la ecología, la economía, los retos del futuro y el análisis político y legislativo. Esas iban a ser mis tareas en la consultora", asegura. Y agrega que "en lo que a mí se refiere, seguiré con mis otros planes profesionales y reorganizaré mi vida pensando en mi familia".
Puertas giratorias
Las puertas giratorias son una realidad. El caso de Garzón no es diferente, son muchos los políticos que tras abandonar sus cargos en la esfera política optan por formar parte de los grandes lobbys españoles.
La falta de regulación al respecto abrió de par en par las puertas giratorias, posibilitando la contratación de antiguos ministros, secretarios de Estado y diputados por parte de firmas como Acento, LLYC (antigua Llorente y Cuenca), Harmon, Kreab o Vicen Consulting. Todas ellas tienen siguen una misma línea de trabajo: tratar de influir en las decisiones políticas, económicas y fiscales, aprovechando los contactos e influencias de sus cargos pasados en beneficio de sus clientes.