La presión de la inflación comienza a igualarse en la comparativa entre el alza de las retribuciones salariales y los precios. Según el monitor de economía en tiempo real de CaixaBank, los sueldos encadenan dos meses consecutivos creciendo en torno al 4% interanual, un ritmo similar e incluso superior al crecimiento de la inflación general, en el 3,3% y en el 4,1% durante los dos meses previos. Un reciente análisis del Banco Central Europeo (BCE) mantiene la vigilancia de cerca sobre salarios y márgenes empresariales para evitar efectos negativos sobre los precios y la tasa subyacente sigue siendo la mayor preocupación.
La curva de los dos parámetros comienza a cruzarse. De hecho, al excluir al sector público de los datos que ofrece la entidad bancaria, el alza es incluso mayor en el sector privado (4,3%), lo que indica que los trabajadores comienzan a recuperar el terreno perdido durante la crisis de precios iniciada en primavera de 2021 y agravada por la crisis energética –los precios importados de las materias primas empezaron a despuntar en verano de 2021– que empeoró con el conflicto en el Este de Europa.
De hecho, es la primera vez en dos años que el alza de los salarios supera al de los precios. Una vez explicado que los precios importados, y no los márgenes ni los salarios, han provocado el desvío de precios, parece ser el momento indicado para pactar subidas. "El descenso de la inflación está creando las condiciones para que se pueda empezar a recuperar el poder adquisitivo", señala el Plan de Estabilidad.

Tal y como publicó elEconomista.es, en marzo una parte considerable de los convenios colectivos firmados ya incluía revisiones salariales por encima de la variación de precios, lo que explicaría la continuidad de una tendencia y una semejanza entre los datos de Trabajo y los de la entidad bancaria. Para un 31% de los asalariados y un 34% de las empresas la subida fue prácticamente del 5%, 1,7 puntos por encima de la inflación general del mes de marzo (3,3% interanual).
Subidas previstas en España
El Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) recién acordado por CEOE, Cepyme, UGT y CCOO recomienda subidas salariales por valor del 4% para este año para tratar de mejorar las condiciones económicas de los trabajadores, sin ser obligatoria esta subida.
En el documento remitido a Bruselas, el equipo de Economía que lidera la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, el Gobierno espera que la remuneración por asalariado crezca un 4,7% y apunta a un mayor ritmo estos primeros meses del año, siendo este el indicador más destacado del mercado laboral debido a la interminable negociación colectiva en el diálogo social. En aquella negociación se habló de productividad, también de márgenes o beneficios empresariales.
El último panel de Funcas que recoge el consenso de los principales servicios de estudios económicos mantiene que los salarios crecerán un 4% este año, exactamente la misma previsión que comparten para el crecimiento medio del IPC.
Vigilancia en Europa
Son indicadores que también vigila el Banco Central Europeo a nivel comunitario, pues en un reciente informe destacan los peligros aún latentes del cóctel de sueldos, precios y tasa subyacente. "Al ir perdiendo importancia los costes de la energía, la evolución de los salarios y de otros costes laborales influye cada vez más en la persistencia de la inflación subyacente de la zona del euro", señalaron en el boletín económico.
Desde el banco central asumen que una evolución al alza mayor de lo previsto en márgenes empresariales y salarios sería un riesgo considerable para la evolución de los precios.
Entre los países del euro, explican que las presiones de los salarios se están haciendo notar, porque "los trabajadores, en un contexto de solidez de los mercados de trabajo, han recuperado parte del poder adquisitivo perdido como consecuencia de la alta inflación".
Uno de los más señalados es el de los servicios, el más volátil y expuesto desde la pandemia, cuando sus retribuciones y puestos se desplomaron y ahora cosechan las mejoras salariales más destacadas –en Europa y en España– y, a la vez, tiene una alta demanda por el ahorro acumulado.
A nivel de la eurozona, es debido a las subidas fuera del 2% objetivo por lo que desde la institución que preside Christine Lagarde argumenta y apoya su vigilancia constante sobre salarios. "Aunque la mayoría de los indicadores de las expectativas de inflación a largo plazo se sitúan actualmente en torno al 2%, algunos indicadores han aumentado y requieren un seguimiento continuo".
Lo que espera la patronal
Tanto la CEOE, como el think tank económico asociado a la patronal, el Instituto de Estudios Económicos (IEE), recoge en el panel de Funcas un crecimiento previsto de los salarios del 3,9%, muy próximo al consenso. Además, la patronal recuerda que las subidas pactadas por convenio del 3,14% hasta abril son orientativas. El dato es "fruto en buena medida de la activación a inicios de año, a efectos estadísticos, de todas las revisiones salariales ya incorporadas a convenios plurianuales registrados en años anteriores".
Es decir, lo verdaderamente interesante del análisis de las mejoras por convenio subyace en las nuevas cláusulas pactadas que se conocerán conforme evolucione el año. "Habrá que observar la evolución de la variación salarial en los próximos meses", explican en su último análisis del mercado laboral publicado. De hecho, los convenios firmados este año con efectos económicos en 2023 y que mayor efecto podrían tener sobre el cruce de la curva de los salarios frente a la inflación apenas cubren a 760.534 trabajadores, a través de 216 acuerdos.
Desde la patronal valoran de forma positiva la recomendación de mejoras salariales este año. "Nuestra previsión es que el ANEC va a ayudar a moderar la inflación en España, ya que al evitar las tan temidas espirales de precios y salarios, la evolución de los precios va a poder moderarse, con los consiguientes efectos benéficos para todos", explican fuentes patronales.
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