El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, continúa su cruzada para resolver el problema de las vacantes en España, cifradas en 140.000 por el INE, a través de la contratación de ciudadanos extranjeros, entre los que se incluyen aquellos que se encuentran en nuestro país en situación de irregularidad. El ministro hasta ahora se ha encontrado con la oposición de los sindicatos y el Ministerio de Trabajo, que consideran que no tiene sentido contratar en origen con cerca de tres millones de parados.
Escrivá mantuvo una reunión este miércoles con los agentes sociales en la que les entregó un borrador de instrucción ministerial para que estos presenten alegaciones. Fuentes de la negociación consultadas por este medio indican que el ministro quiere remodelar el Reglamento de Extranjería, aprobado el verano pasado, para flexibilizar las condiciones para contratar en nuestro país.
El texto en cuestión plantea la reforma de la disposición relativa al arraigo por formación, que hasta el momento comprende autorizar, hasta doce meses, de residencia a los extranjeros "que acrediten la permanencia continuada en España durante un periodo mínimo de dos años".
Desde CEOE-Cepyme apremian a Seguridad Social su intención de resolver el problema de las vacantes por la actual "rigidez" del sistema.
Las patronales, son favorables a tender puentes desde el desempleo a la ocupación, "ya sea a través de esta figura, políticas activas de empleo, etc.", explican fuentes consultadas por elEconomista.es, que también inciden en que esta es una forma de sacar a muchos extranjeros de actividades enmarcadas dentro de la economía sumergida. Este problema, se agrava en las pymes, "con menos recursos para captar trabajadores".
Por parte de UGT, consideran que la propuesta va en buena dirección y presentarán alegaciones, incidiendo en la necesidad de que se "garanticen todos los derechos de las personas migrantes que se encuentran en situación de vulnerabilidad". Comisiones Obreras, por su parte, no han querido comentar nada "de momento".
Desde el Ministerio de Inclusión cuentan a elEconomista.es que no se flexibiliza la llegada de migrantes, "puesto que el arraigo para formación es para los que ya están aquí" (deben acreditar al menos dos años residiendo en España). "Es importante respetar las vías de llegada legal", inciden.