En el tercer trimestre del curso pasado, en Europa, tres millones de ciudadanos, con edades comprendidas entre los 20 y 64 años, perdieron su trabajo por motivos laborales (finalización de un contrato de duración determinada, un despido o el cierre de una empresa por motivos económicos). España es responsable de nutrir el 28% de la estadística, 842.765 personas fueron despedidas en España de julio a septiembre, siendo el país que más aporta de los 27 en este aspecto.
En el caso de nuestro país, esta pérdida de ocupación supone el 5,2% del total de personas que tienen trabajo en nuestro país.
Durante el tercer trimestre, en Europa, más de dos tercios de las personas que habían perdido su empleo (68,9%), fue por algún motivo laboral. En términos interanuales, la proporción se redujo en 3,2 puntos porcentuales. Las personas principalmente afectada por estas bajas fue muy superior para aquellos ciudadanos con bajo nivel de educación, afectó al 74,6%.
El motivo principal de estos abandonos de trabajo fue el término de la relación contractual (53,1%). Lo que supone una disminución de 3,9 puntos porcentuales (pp) respecto al mismo trimestre de 2021 (57,0%).

La finalización de los contratos de trabajo tuvo mayor fuerza en el despido para aquellos ciudadanos que fueron despedidos con un nivel educativo bajo (57,1 %), seguido de aquellos con un nivel educativo alto (56,3 %) y con un nivel medio ( 47,5%).
La segunda razón más común para dejar un trabajo fue el despido o el cierre de una empresa por razones económicas, que afectó a 545 mil personas (15,8% de todos los que abandonaron recientemente el trabajo frente al 15,1% en el tercer trimestre de 2021). El abandono del trabajo por otros motivos o no declarados ocupó el tercer lugar, afectando a 478 mil personas (13,9%), seguido de la educación u otros motivos personales (311 mil personas; 9,0%) y motivos familiares, enfermedad o jubilación (283 mil personas; 8,2%).
Brecha laboral
Teniendo en cuenta los diferentes grupos de edad comprendidos en la estadística, el 53 % de los hombres y el 46,7 % de las mujeres de 15 a 29 años estaban empleados, mientras que la proporción aumentó al 88,5 % de los hombres y al 77,4 % de las mujeres de 30 a 54 años, y disminuyó al 69,2 % de los hombres y al 56,6 %. % para mujeres de 55 a 64 años. En general, cuanto mayor es la población, mayor es la brecha laboral entre hombres y mujeres. En cuanto al desempleo, la proporción fue la misma para hombres y mujeres, 4,6 % de todas las personas de 15 a 64 años, y alcanzó el valor más alto entre los hombres jóvenes de 15 a 29 años (6,9 %) y el más bajo entre las mujeres de 55 a 64 años ( 2,7 %). Además, casi la mitad de los hombres y mujeres de 15 a 29 años estaban fuera de la fuerza laboral frente al 7,5 % de los hombres y el 18,1 % de las mujeres de 30 a 54 años, y el 27,7 % de los hombres y el 40,6 % de las mujeres de 55 a 64 años.
Italia lidera las bajas
Si centramos el tiro en las bajas laborales, durante el tercer cuarto del año el país miembro en el que más bajas con motivo laborales produjeron fue Italia(89,9 %), seguida de Hungría (88,6 %), Grecia (87,6 %), España ( 81,6%) y Croacia (70,6%). Hubo una gran brecha entre los porcentajes más altos y más bajos, con el porcentaje más bajo registrado en los Países Bajos (27,3 %). Le siguieron la República Checa (31,6 %), Lituania (32,3 %), Estonia (36,6 %) e Irlanda (36,7 %).
El peor dato de contratación desde 2021
El número de nuevos contratos en el mismo periodo de tiempo fue muy superior al dato de despidos. Entre los 20 y 64 años, se produjeron 7,7 millones de nuevos contratos. Este es el peor dato a nivel europeo desde el segundo trimestre de 2021.
Las personas que recientemente comenzaron a trabajar representaron el 4,9 % del empleo total de las que se encontraban anteriormente ejerciendo una actividad en el tercer trimestre de 2022 frente al 5,1 % en el tercer trimestre de 2021. La proporción de personas que recién comenzaron a trabajar fue significativamente mayor entre las personas con un nivel educativo bajo (7,4 % del empleo total para esta categoría) que para las personas con un nivel educativo medio o alto (4,5 % y 4,6 %, respectivamente). En el tercer trimestre de 2022, solo los recién incorporados al trabajo con un alto nivel de educación aún estaban por encima de su nivel del tercer trimestre de 2021 (0,1 puntos porcentuales), aquellos con un nivel de educación bajo y medio registraron una disminución en el tercer trimestre de 2022 en comparación con el tercer trimestre de 2021 ( 0,5 pp negativos para los de nivel bajo y -0,3 pp para los de nivel medio).
La volatibilidad del mercado
De los casi 8 millones de nuevos contratos que se produjeron en este tiempo, 1,2 millones se produjeron en España, el 16% del total del territorio europeo.
Para el economista, Javier Santacruz, el mercado laboral en España "se ha vuelto muy dinámico en la contratación especialmente a tiempo parcial, creando y destruyendo empleo a ritmos más altos que hace años; de ahí que la mayor parte de los despidos sean por motivos laborales, porque hay rotación, movimientos entre empresas... todo ello fundamentalmente en el segmento de la contratación a tiempo parcial".
Finalmente, según datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA) trimestral, el balance se mantiene favorable para las actividades pertenecientes al tercer sector.