
Las pensiones de jubilación en España sufren cambios de forma periódica debido a las reformas del sistema que se han producido en la última década. Es por eso que algunos requisitos o condiciones clave van cambiando con el paso del tiempo (las reformas impusieron calendarios progresivos para implantar sus cambios), aunque en otros aspectos no se dan modificaciones.
Es el caso del método de acceso a las pensiones de jubilación. A pesar de las diferentes reformas que han afectado al sistema, los requisitos para conseguir una pensión contributiva no se han visto afectados. De hecho, la de jubilación es la pensión contributiva más abonada de todas: 6,32 de los 10 millones que se pagaron en enero, según los datos que recoge el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
La Ley General de la Seguridad Social recoge en su artículo 205 (puede consultarse en este enlace del Boletín Oficial del Estado) los requisitos para acceder a una pensión contributiva de jubilación:
-Llegar a la edad ordinaria de jubilación, que en 2023 es de 65 años para las personas que acumulen 27 años y nueve meses de cotización y de 66 años y cuatro meses para las que no lleguen a ese nivel cotizado.
-Estar en una situación de alta o asimilada en la Seguridad Social.
-Una cotización de al menos 15 años, de los cuales dos deben producirse en los 15 años inmediatamente anteriores a la solicitud de la pensión de jubilación.
Si no se cumple con este criterio de cotización no se podrá cobrar la pensión contributiva de jubilación. En ese caso al ciudadano le quedaría la opción de probar suerte con una pensión no contributiva de jubilación, la que se destina a las personas que no han cotizado lo suficiente.
La cuantía de tu pensión según tus años cotizados
La cotización es un elemento vital para las pensiones de jubilación y no solo porque marcan el acceso a las mismas. En paralelo, el nivel de cotización que puede acreditar una persona será el que determine la cuantía de su pensión: a más cotización, más opciones de cobrar una pensión de mayor importe.
La razón se contempla en el artículo 210 de la Ley General de la Seguridad Social, que hace referencia a la cuantía de la pensión de jubilación y que hace referencia a la obtención de diferentes porcentajes de la base reguladora en función del periodo cotizado a lo largo de la vida laboral. Así, dependiendo del tiempo cotizado se obtienen mayores o menores porcentajes de la base reguladora.
Por norma general los trabajadores que consiguen el mínimo de cotización para tener pensión, 15 años, tienen derecho a percibir el 50% de la base reguladora. A partir de esos 15 años, conforme aumentan las cotizaciones se genera derecho a mayores porcentajes de la base reguladora.
Estos porcentajes son uno de los cambios progresivos que impuso la reforma de las pensiones de 2011, que amplió el número de años necesarios para tener derecho al 100% de la pensión. Para 2023 (y hasta 2026) los porcentajes son los siguientes:
-Por cada uno de los siguientes 49 meses cotizados se concede un 0,21% extra de la base reguladora.
-Por cada uno de los siguientes 209 meses cotizados se concede un 0,19% extra de la base reguladora.
En base a estos números solo los trabajadores que hayan cotizado 36 años y seis meses podrán cobrar el 100% de la base reguladora, lo que se conoce como 'el 100% de la pensión'. Esto es seis meses más que en 2022, por lo que en este año ha aumentado medio año con la llegada de 2023.