El Gobierno ultima el real decreto a través del cual volverá a subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta los 1.080 euros mensuales repartidos en 14 pagas. La medida será aprobada el próximo 14 de febrero en Consejo de Ministros, pero entrará en vigor con carácter retroactivo desde el pasado 1 de enero. Sin embargo, esta nueva actualización ha dejado al descubierto la enorme brecha salarial que existe a lo largo y ancho de España.
Hasta 22 provincias cuentan con un sueldo medio que apenas supera por un 35% al nuevo salario mínimo, según datos de Cepyme. Extremadura, casi toda Andalucía y cinco de las siete provincias de Castilla y León se cuentan entre ellas.
La distancia se acorta en territorios como Zamora, en el que la diferencia no llega al 18%. Al otro lado se sitúan regiones como País Vasco, donde el 46% de sus habitantes cobran al menos 2.342 euros brutos o la Comunidad de Madrid, en la que el porcentaje se sitúa en el 38,6%. En ambas, junto a Navarra, la remuneración media se sitúa entre los 2.250 y 2.452 euros, según se desprende de la EPA publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) a finales del pasado 2022. Los datos coinciden con el PIB per cápita por provincia. Antes del estallido de la pandemia las mayores cifras se congregaron en Álava, con una renta de 36.624 euros, o Madrid con 36.049 euros.
La evolución del salario mínimo no solo persigue de cerca al sueldo medio en Zamora. Representa el 80,2% en Ávila, el 77,4% en Badajoz y Salamanca, o el 75,6% en León. En todas ellas, el número de trabajadores que no superan los 1.000 euros se dispara con respecto a la media española. Los mismo ocurre con buena parte de Andalucía. La diferencia entre el SMI y el salario medio en Jaén es del 27%, en Córdoba o Cádiz, la distancia es inferior al 30%. Ninguna de las tres supera los 19.000 euros de renta per cápita.
La España vaciada
En unos días, buena parte de las empresas se verán obligadas a incrementar sus costes para cumplir con la legislación, muchas de ellas dedicadas al sector primario. "Perjudica de nuevo el campo español", dijo el director general de Asaja, Juan José Álvarez, tras conocer la nueva actualización anunciada por el propio jefe del Ejecutivo durante su intervención en el Senado el pasado 31 de enero. El salario medio en la agricultura, ganadería o pesca se sitúa en los 1.352 euros brutos, según el INE.
El problema se amplifica en aquellos territorios más afectados por la despoblación. En su informe, Cepyme asegura que "subir el salario mínimo dificultará la contratación en esas provincias y profundizaría el problema demográfico". El paro creció en enero especialmente en estos lugares. Zamora vio repuntar en un 4,84% su número de desempleados, Guadalajara o Cuenca sufrieron un incremento del paro del 6,41% y el 5,89%, respectivamente según los datos de los registros del SEPE difundidos por el ministerio de Trabajo el pasado jueves.
Desde las organizaciones empresariales recuerdan que entre el cuarto trimestre de 2013 y el mismo de 2018, el número de ocupados en tareas elementales y no elementales aumentaron en torno al 14%, "esa dinámica se rompió desde que se decidió aumentar de manera exagerada el salario mínimo", denuncia Cepyme que recuerda que entre el cuatro trimestre de 2018 y el segundo de 2022, la afiliación se redujo entre un 2,8% y un 5,7%, respectivamente, como consecuencia de la subida del SMI.
Un reto para la hostelería
Sánchez arrancó su legislatura con un SMI de 735 euros, desde entonces ha sumado 345 euros hasta ubicarlo en el salario mínimo con mayor subida con respecto a la renta per cápita entre los grandes del euro. "Entre 2017 y 2022, en el Reino Unido subió un 30,4%, en Alemania, un 15,8% y en Francia, un 11,2%; en España ha crecido un 41,3%", asegura Cepyme.
Desde la organización apuntan al sector de la hostelería -uno de los que mayor caída de la afiliación sufrió el pasado mes de enero- como uno de los más castigados por el incremento del SMI. "Un salario mínimo de 1.082 euros sería prácticamente igual que el sueldo medio", en una actividad a la que se dedican cerca de 1,5 millones de empleados en España. En concreto, la brecha entre ambos salarios se reduce al 4,2%. Lo mismo ocurrierá en el Comercio, donde la relación "sería de cerca del 30%".