
La economía de la zona euro está perdiendo impulso en medio de un entorno dominado por la elevada inflación y los tipos de interés crecientes. Aunque la actividad económica y, sobre todo, el mercado laboral están ofreciendo mayor resistencia de la esperada en un primer momento, la recesión parece casi inevitable en el Viejo Continente. Este escenario está contemplado en las previsiones de varios organismos y departamentos de investigación de instituciones financieras. Entre estos últimos se encuentran los economistas de Deutsche Bank, que en sus últimas previsiones incluyen la posibilidad de que la zona euro caiga en una doble recesión. Esto se ha convertido en el segundo mayor riesgo (tras la inflación) para la Eurozona de cara a los próximos trimestres, según los analistas del banco alemán.
El PIB de la zona euro avanzó un 0,3% en el tercer trimestre de este año, un dato que ha sorprendido al alza, pero que evidencia la fuerte desaceleración que está sufriendo el bloque monetario. Un nuevo informe realizado por quince economistas de Deutsche Bank (DB) y publicado este lunes avisa de que la economía de la zona euro podría estar ya contrayéndose, iniciando el camino hacia una recesión que podría culminar con una salida en 'falso' en la primera parte de 2023 y una recaída posterior.
Esta salida en falso se produciría con la llegada del buen tiempo (primavera-verano) y la reactivación del turismo, un sector que no para de ganar peso en una economía europea cada vez más intensiva en servicios. Sin embargo, los expertos de DB creen que existe el riesgo, cada vez mayor, de que tras ese respiro, la economía caiga en una doble recesión en la parte final de 2023.
Esta situación puede crear una especie de espejismo. Los analistas de DB creen que con llegada de la primavera puede dar la sensación que la economía de la zona euro florecerá y dejará atrás la recesión y los peligros del invierno. Sin embargo, "el desafío del crecimiento no terminará en la primavera. Hay fuertes vientos en contra de la recuperación en 2023, que van desde la previsible recesión en EEUU (una de las principales parejas comerciales de la Eurozona), la pérdida de competitividad relacionada con la energía (muchas empresas industriales abandonarán la zona euro ante la creciente factura energética) y el impacto retardado de un ajuste monetario sustancial".
Aunque los tipos de interés están subiendo ahora, no será hasta dentro de 6 meses o incluso un año cuando se sentirá todo el impacto del endurecimiento monetario. El tipo terminal (el pico de los tipos de interés) del BCE podría encontrarse en el 3%, una zona a la que no se llegará hasta mediados de 2023, según los analistas del banco alemán. Por ello, Deutsche Bank rebaja la previsión del PIB para 2024 al 1%, frente al 1,4% anterior. "Aunque el riesgo es que se produzca una recesión de doble caída entre 2022 y 2023". La recesión no será tan profunda como se temía, pero sí habrá importantes altibajos.
Diferencias entre norte y sur
Esta doble caída tendría lugar entre finales de 2022 y en el conjunto de 2023, cuando se espera una contracción del PIB anual de 0,6% en la zona euro, aunque con diferencias importantes entre países. Austria, Francia, Italia, Alemania (-1%), Bélgica y Finlandia son los países que registrarán una contracción del PIB en el conjunto del próximo año. Mientras que España registrará un crecimiento cero, Portugal crecerá un 0,1%, Grecia un 0,3%, Países Bajos un 0,5% e Irlanda un 1,5%. Frente a la crisis de 2008 o la del covid-19, esta vez serán los países del núcleo los que se llevarán la peor parte.
"La recesión ya ha comenzado, pero parece que va a ser menos profunda y larga este invierno de lo que se temía anteriormente. Ahora, el riesgo es una recesión de doble caída debido a los importantes vientos en contra en 2023, producto de la recesión a la que se enfrentará EEUU, los altos costes de la energía y un ajuste monetario sustancial", advierte el informe del banco alemán, que añade "vemos dos riesgos para las perspectivas de crecimiento. Una es una recesión de 'doble caída': la zona del euro emerge brevemente de la recesión antes de sucumbir a una nueva contracción en la parte final de 2023 a medida que aumentan los vientos en contra económicos. El segundo riesgo es que la zona del euro no sufra recesión corta e inmediata para caer en una recesión 'retrasada' a finales de 2023".
"Estamos infravalorando la inflación en la Eurozona"
Los economistas de DB insisten en la inflación como principal preocupación. Los expertos del banco alemán fueron de los primeros en advertir de la llegada del shock inflacionario a principios de 2021. Muchos tildaron de catastrofistas a sus economistas. Finalmente se probó que tenían razón.
"La inflación es nuestra principal preocupación en la zona del euro. Es improbable que la inflación subyacente alcance claramente su punto máximo (pico) hasta que no pase algo más de tiempo. Los riesgos para la inflación son al alza y las opiniones del mercado y del consenso sobre la inflación siguen siendo demasiado benignas", avisa el nuevo informe de previsiones de Deutsche Bank.
El documento destaca que tanto el mercado como el consenso están subestimando los riesgos de inflación de 2023. Tanto el mercado como el consenso esperan que el IPC armonizado de 2023 se sitúe en torno al 6% interanual. Sin embargo, "nosotros creemos que esto es demasiado bajo (vemos un 7,1% interanual). Esperamos una inflación subyacente de 2023 del 4,7% interanual. Además, vemos una inflación general más alta a largo plazo que es importante para las expectativas y las demandas salariales. Las expectativas de inflación en las encuestas de hogares se han estabilizado en niveles claramente por encima de la meta, y el riesgo de cola de un desanclaje de las expectativas de inflación requiere un seguimiento muy de cerca".
Los economistas que firman el informe de Deutsche Bank ven los salarios creciendo al 5% a finales de 2022... y probablemente se mantengan en ese nivel en 2023. Un mercado laboral extremadamente ajustado y mayores expectativas de inflación sugieren que la curva de Philips de la zona del euro ha vuelto a su posición anterior a la crisis de deuda soberana... No obstante, esperamos que el endurecimiento monetario y la desaceleración del crecimiento eleven el desempleo hasta el 7,4% en 2024, rebajando el crecimiento de los salarios hasta el 3% interanual en 2025", sentencian estos expertos.