
El sistema español de pensiones ha sido sometido a una serie de reformas en la última década por las cuales aún sigue modificándose de forma anual. La razón es que buena parte de estas reformas se aplican en periodos transitorios y mediante la aplicación de calendarios progresivos compuestos por una serie de fases hasta alcanzar los objetivos finales.
Es lo que sucede, por ejemplo, con el número total de años para determinar el porcentaje de la base reguladora a la que tiene derecho el trabajador y que será su futura pensión de jubilación. Una referencia que se verá modificada en 2023 y durará al menos cuatro años, hasta el final de 2026.
La explicación la tiene la reforma de las pensiones de 2011 con la que, en plena crisis financiera, se aprobó el retraso en la edad de jubilación y el aumento de años a tener en cuenta de cara al cálculo de la jubilación, así como el incremento de los años necesarios para conseguir el 100% de la base reguladora, lo que se conoce de forma tradicional por los trabajadores como 'el 100% de la pensión'.
El texto de la Ley 27/2011, de 1 de agosto (se puede consultar en este enlace del Boletín Oficial del Estado) introdujo una disposición transitoria en la Ley General de la Seguridad Social por la que se modifica la aplicación de los porcentajes a atribuir a los años cotizados para la pensión de jubilación. En la práctica, este cambio tiene el objetivo de retrasar la elevar la exigencia de los requisitos para jubilarse con una mayor cuantía de la pensión, ya que va aumentando los años a tener en cuenta para conseguir el 100% de la misma en un calendario progresivo.
Así, para 2023 comienza una nueva fase de este calendario que estará vigente hasta 2026 y en la que los porcentajes de aplicación serán los siguientes, tal y como se recoge en la página web de la Seguridad Social:
-Con 15 años cotizados el trabajador tendrá derecho al 50% de la base reguladora.
-A partir de ahí, por cada uno de los siguientes 49 meses se obtendrá un 0,21% extra de la base reguladora.
-Después, por cada uno de los siguientes 209 meses se conseguirá un 0,19% extra de la base reguladora.
Con estos parámetros, a partir de 2023 los trabajadores que deseen jubilarse con el 100% de su base reguladora tendrán que acumular un total de 258 meses cotizados, es decir, 36 años y medio de cotización.
Esto supone un aumento de medio año en la cotización necesaria para conseguir el 100% de la pensión, ya que en el periodo 2020-2022 (el que aplicará hasta el 31 de diciembre) se obliga al trabajador a llegar a 36 años cotizados para poder cobrar el 100% de la base reguladora, dado que desde los 15 años por cada uno de los siguientes 106 meses se da un 0,21% extra de la misma y en los 146 meses siguientes un 0,19%.
El que tendrá lugar en el periodo 2023-2026 será el penúltimo hito del calendario progresivo de la reforma. En 2027 llegará a su fin con la ampliación definitiva a 37 años cotizados para llegar al 100% de la pensión. Desde ese momento, por cada uno de los 248 meses siguientes a los 15 años cotizados se otorgará un 0,19% extra de la base reguladora y por cada uno de los 16 meses siguientes se concederá un 0,18% para conseguir el 100% de la pensión de jubilación con 37 años cotizados.