
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha abogado por incorporar a los pensionistas al denominado pacto de rentas, de manera que solo las pensiones mínimas se revaloricen conforme a la inflación en un contexto en el que los precios se han disparado a consecuencia de la guerra en Ucrania.
En una intervención en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Sevilla, el gobernador ha dicho que, para aliviar la presión que la subida de los precios de consumo supone para las rentas más bajas, se podría pensar en "permitir la indiciación (al IPC) de las pensiones mínimas, pero quizá no las del resto". Según ha dicho, las pensiones más altas deberían incorporarse "a ese reparto de la pérdida de renta que es el incremento de los precios energéticos".
"Esta podría ser una idea para tratar de no dejar desprotegidos a los colectivos más vulnerables, en este caso a los colectivos más vulnerables entre los que se encuentran algunos de los pensionistas", ha añadido. A su juicio, un pacto de moderación de rentas debe incluir la desvinculación del IPC no solo de los salarios del sector privado, sino también de partidas de gasto público como son las pensiones.
Hernández de Cos ha considerado que, en el contexto actual, las negociaciones salariales deben plantearse para horizontes temporales de varios años y ligadas a la inflación subyacente (la que excluye energía y alimentos no elaborados) o a cláusulas de protección del empleo.
Asimismo, ha insistido en que las directrices para la evolución salarial deben acompañarse también de "compromisos explícitos de moderación de los márgenes empresariales", porque solo así la contención salarial se trasladará efectivamente a la competitividad empresarial.
Guerra contra la inflación
Durante la ponencia, De Cos ha mantenido que un pacto de rentas entre trabajadores y empresarios permitirían "minimizar" la persistencia y los costes del actual shock inflacionista y ha abogado por evitar fórmulas de indiciación automática de los salarios a la inflación pasada o de cláusulas de salvaguardia.
"es necesario" un pacto de rentas en el marco del diálogo social para evitar que se desencadene una realimentación de incrementos y costes. Ha subrayado la importancia de que los costes se repartan entre todos los agentes implicados. "La información que disponemos sugiere que este reparto de costes entre empresas y trabajadores se estaría produciendo ya de forma tácita", ha asegurado.
Ha subrayado la importancia de que el pacto de renta "contemplara compromisos plurianuales concernientes a los incrementos salariales y a la protección del empleo, ya que "aportaría certidumbres a hogares y empresas a la hora de tomar decisiones de gastos e inversión"
En esta línea, el gobernador del Banco de España ha puesto de relieve que "el encarecimiento de los bienes energéticos tiene efectos importantes sobre el coste de la cesta de consumo de los hogares y sobre el coste de la producción de las empresas, por lo que las autoridades europeas "se han propuesto formalmente reducir la dependencia energética rusa con carácter estructural".