El precio medio del gasóleo en España ha subido más de 7 céntimos por litro (un repunte del 4%) desde el pasado 21 de marzo, cuando el Gobierno, después de reunirse con los transportistas de mercancías por carretera, anunció formalmente que planeaba bonificar el precio de los carburantes.
Así se desprende de los datos recogidos por el Ministerio para la Transición Ecológica y enviados a diario por las más de 11.500 gasolineras del país, y que reflejan en el diésel un alza superior al descuento de 5 céntimos por litro que deberán ofrecer a los usuarios y asumir como parte de su coste las estaciones de servicio a partir del 1 de abril.
La bonificación total se prolongará tres meses y ascenderá a un mínimo de 20 céntimos por litro, ya que el Estado se hará cargo de aportar otros 15 céntimos a cargo de las arcas públicas.
En el caso de la gasolina de 95 octanos, esta subida ha sido de unos 4 céntimos respecto al 21 de marzo, lo que equivale a un incremento del 1,23%, la misma cantidad que ha aumentado el precio de la gasolina de 98 octanos.
De media, el precio de la gasolina 95 en las estaciones de servicio españolas se situaba este miércoles en el entorno de los 1,81 euros por litro (aunque en 4 puntos de venta superaba los 2 euros), frente a los 1,94 euros de la 98 (rebasa los dos euros en más de 800 establecimientos).
En el caso del gasóleo, el combustible más utilizado en España -especialmente por los transportistas-, el precio medio rondaba los 1,84 euros (en seis estaciones de servicio sobrepasaba también la barrera de los dos euros).
El precio medio del gasóleo superó al de la gasolina 95 el 23 de marzo, algo poco habitual, y desde entonces se ha mantenido por encima.
El Gobierno hará un seguimiento de precios
Ante este panorama, el Gobierno ha asegurado que hará un seguimiento de los precios en las gasolineras para que la bonificación para los consumidores no pierda eficacia. Así lo ha señalado la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, en declaraciones a la prensa desde el Congreso, donde ha precisado que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) controlará que no se produzcan incrementos sospechosos.
Fuentes del regulador han explicado a Europa Press que, en el marco de sus competencias en materia de competencia y supervisión, ya ejerce diariamente sus labores de supervisión y que, en caso de encontrar alguna anomalía, intervendría.
Asimismo, el Ejecutivo también ha pedido a las estaciones de servicio "responsabilidad" a la hora de aplicar la bonificación de 20 céntimos que entra en vigor este viernes y ha recordado que serán las autoridades de Competencia las que analizarán su correcta puesta en marcha.
"El plan de respuesta es un plan de país, como lo fue la respuesta a la pandemia. Las consecuencias de la guerra necesitan de la unión de los agentes económicos y las Administraciones y pedimos responsabilidad, a cada uno en su ámbito de actuación", ha defendido en declaraciones a los periodistas en el Congreso la ministra de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto.
Los precios suben pero el petróleo cae...
Desde el 21 de marzo, el barril de petróleo de Brent -de referencia en Europa- ha caído un 4 %, hasta situarse hoy en torno a 112,3 dólares. En estos diez días la cotización del crudo ha registrado notables subidas y llegó a tocar los 123,7 dólares, aunque de media en este período su precio se situó en 115,7 dólares.
Un promedio menor al que se registró en la semana del 7 al 11 de marzo, cuando el Brent alcanzó los 120,32 dólares por barril, y algo mayor que el que se marcó entre el 14 y el 18 de marzo, cuando fue de 104,06 dólares por barril.
Sin embargo, las variaciones en el peso del crudo se suelen reflejar de manera asimétrica en los precios de los carburantes: la bajada del precio del petróleo no se traslada tan rápido como su ascenso y comienza a sentirse en los contadores en torno a 20 días después de que los barriles se abaraten, un fenómeno al que se denomina "efecto de pluma y cohete".
Pagamos un 25% más desde el inicio de la guerra
Los precios de los carburantes se han disparado desde que comenzara la invasión rusa de Ucrania el pasado 24 de febrero, con un repunte del 25% del gasóleo y del 14,5% en el caso de la gasolina.
Para atajar el problema que supone el encarecimiento de los combustibles, el Consejo de Ministros aprobó este martes un paquete de ayudas directas que incluyen bonificaciones mínimas de 20 céntimos por cada litro de carburante para todos los consumidores desde el viernes 1 de abril y hasta el 30 de junio.
De cada 20 céntimos bonificados, 15 le corresponderá abonarlos al Estado, y 5 a las petroleras, aunque las tres empresas con más gasolineras en España (Repsol, Cepsa y BP) ya han anunciado que elevarán esa cuantía de forma voluntaria.