Biden presiona para agilizar la aprobación de su agenda

Con las elecciones legislativas de noviembre de 2022 en mente y una inflación no vista en casi cuatro décadas, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, busca acelerar la aprobación de su ambicioso proyecto Build Back Better (Reconstruir Mejor). El conjunto de propuestas de gasto social y medioambiental por un valor aproximado de 1,85 billones de dólares (si incluimos la partida migratoria) depende ahora de la aprobación de los senadores demócratas.

El inquilino de la Casa Blanca se reunió el lunes con Joe Manchin, el senador de Virginia Occidental, que hasta ahora ha mostrado su reticencia a avalar el grueso de la agenda económica de Biden. Manchin, junto a la senadora por Arizona, Kyrsten Sinema, buscarán en los próximos días realizar cambios en la versión del proyecto de ley, ya aprobado en la Cámara de Representantes, antes de dar su beneplácito.

Inflación y déficit

Manchin ha expresado constantemente su preocupación por la inflación y ha insistido en que solo apoyaría un proyecto de ley totalmente financiado sin aumentar el déficit. La Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO por sus siglas en inglés) estimó inicialmente que éste añadiría al menos 200.000 millones de dólares al déficit en 10 años.

Sin embargo, a petición de senador republicano, Lindsey Graham, la agencia publicó una nueva estimación asumiendo que todos los programas se prorrogan durante los 10 años completos, lo que aumentaría el déficit en 3 billones de dólares a lo largo de la próxima década. Por otra parte, los demócratas están en camino de aumentar el límite de la deuda tras un acuerdo en el Senado.

Todavía no se ha anunciado la cuantía del aumento, pero se espera que sea de unos 2 billones de dólares, lo suficiente para retrasar cómodamente el próximo límite duro durante más de un año. Es decir, más allá de las elecciones legislativas en noviembre del año que viene.

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