Economía

Petya Koeva Brooks: "España recuperará el nivel anterior a la crisis en el tercer trimestre de 2022"

  • "No estamos, ni mucho menos, en un entorno en el que veremos estanflación"
  • "Europa tiene margen para amortiguar el choque de la subida de precios"
  • Fondos europeos: "Su impacto en España es un punto porcentual este año"
Petya Koeva Brooks, subdirectora del Departamento de Investigación Económica del Fondo Monetario Internacional (FMI). eE
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El Fondo Monetario Internacional ha puesto de manifiesto esta semana los múltiples retos que enfrenta la recuperación económica global. Tras el repunte previsto como consecuencia del "gran confinamiento" y posterior reapertura, los riesgos afloran. No solo las consecuencias de los masivos estímulos fiscales y monetarios, que sirvieron de colchón para amortiguar el histórico golpe, también los efectos inesperados de la reactivación. Los cuellos de botella en las cadenas de suministro y las dinámicas laborales presentan un nuevo enigma que aumenta el margen de error desde la perspectiva política.

En el caso de España, el impulso se hace esperar y según confiesa Petya Koeva Brooks, la directora adjunta del Departamento de Investigación del FMI, llegará el próximo año. En este sentido, la inversión será un motor clave que viene potenciado por los fondos europeos. Estos contribuirán en 0,7 puntos porcentuales al avance económico de nuestro país en 2022.

Dicho esto, la economía española será la que mayor tasa de paro registre el próximo año entre las economías avanzadas, con países como Grecia, que también dependen del turismo y los servicios, reduciendo el desempleo a un ritmo mucho más rápido. Todo ello en un momento en que las condiciones generales a nivel mundial pintan un panorama complicado, donde las referencias históricas no son tan útiles como lo han sido en el pasado.

¿Cuándo recuperará la economía española la tendencia anterior al Covid y qué impacto cree que tendrán los fondos 'Next Generation' en el crecimiento?

Hemos rebajado nuestra previsión para España este año al 5,7% y mejorado la del año que viene al 6,4%. Cuando se miran estas cifras se puede observar que la mejora del próximo año casi compensa con creces la rebaja de este año, lo que es solo otra forma de decir que, dados los datos que observamos en el segundo trimestre, estamos proyectando básicamente una recuperación que empieza un poco más tarde y cuya mayor parte ocurre en 2022. Esperamos un segundo semestre más fuerte a medida que el consumo privado se recupera y el mercado laboral se fortalece. El próximo año estimamos que la inversión se convierta en el principal motor del crecimiento a medida que la pandemia disminuye. Y ahí es exactamente donde entra el papel de los fondos de la UE. Básicamente, en nuestras previsiones, el impacto de estos fondos es de aproximadamente un punto porcentual de crecimiento este año y del 0,7% en 2022. A su pregunta sobre cuándo se alcanzará el nivel anterior a la crisis, en algún momento del tercer trimestre de 2022.

Fondos europeos: "Su impacto en España es sobre un punto porcentual este año"

Sin embargo, la reducción del desempleo languidece en comparación con otros países...

Una cosa que en general estamos observando en esta recuperación es que el empleo ha ido por detrás de la producción. Esto es, en cierto modo, un fenómeno global. Ni siquiera se trata solo de las economías avanzadas, sino también de los mercados emergentes. Y parte de la razón es una recuperación muy inusual, donde todavía hay problemas de salud. En algunos casos, la gente es reacia a volver al trabajo, especialmente en el sector de servicios con un contacto intensivo. También es un tipo de recuperación que crea desajustes entre la oferta y la demanda en diferentes sectores de la economía. Eso también está influyendo. Pero otra cosa que no debemos olvidar es que para los países más afectados por el turismo y, en general, por los servicios, y creo que aquí es donde España realmente destaca, estos sectores todavía no están cerca de la recuperación total.

"El turismo y en general los servicios en España no están cerca de la recuperación total"

¿Van entonces las reformas de España en la dirección correcta?

En cuanto a las reformas que se están contemplando creemos que en el ámbito laboral se centran en los aspectos adecuados: en abordar la dualidad en el mercado laboral español, en tener más flexibilidad y demás. La parte que nos gusta especialmente es el énfasis en la política activa del mercado laboral, porque hemos visto que los esquemas a corto plazo son muy eficaces, pero como estamos saliendo de la crisis, queremos ver más del mercado laboral activo y programas de formación para ayudar realmente a la gente a reintegrarse en el mercado laboral. Ahora, para ser concretos, también apoyamos la propuesta de limitar el número de contratos.

"Se centra en los aspectos adecuados y aborda la dualidad en el mercado español"

Dada la situación que se vive con los precios de la electricidad ¿están tomando los gobiernos europeos las medidas adecuadas para amortiguar los costes energéticos?

Este es uno de los temas que más ha saltado a la palestra en las últimas semanas. Y ya estamos hablando de una crisis energética. Ha sido una tormenta perfecta de factores, tanto del lado de la demanda como de la oferta, con factores regionales y estacionales. Hemos visto que Europa y Asia se han visto especialmente afectadas. A corto plazo creemos que hay margen para que los gobiernos y las acciones tomadas amortigüen parte del impacto de este choque. Los hogares de bajos ingresos son los que tienen una proporción mucho mayor de su gasto en energía y es por ello por lo que ayudarles a hacer frente al choque es especialmente importante.

"Europa tiene margen para amortiguar el choque de la subida de precios"

¿Y las ayudas para las empresas?

Otra vía de apoyo que los gobiernos pueden proporcionar sería intentar amortiguar el impacto en las compañías eléctricas. No queremos que las empresas quiebren y que se produzca una escasez generalizada por algo que es esencialmente una crisis que se resolverá por sí sola con el tiempo. A medio plazo enfatiza algo de lo que hemos estado hablando durante mucho tiempo, que es la necesidad de invertir en energías renovables y materializar las inversiones verdes. Y esto es algo de lo que se va a hablar mucho más después de esta crisis.

"Esperamos que la inversión se convierta en motor para España en 2022"

¿Cuáles son los riesgos de la divergencia de la recuperación posterior a la crisis que estamos viendo entre las economías avanzadas y los mercados emergentes?

El principal riesgo que vemos en este momento, que en parte ya se está materializando, es que las divergencias a corto plazo duren más y veamos cicatrices. Y eso es lo que ya tenemos en nuestra línea de base. Básicamente observamos que las economías avanzadas registrarán en 2025 un nivel de producción un 0,9% superior a la tendencia previa a la pandemia. La misma cifra para las economías emergentes y en desarrollo, sin contar con China, es del -5,5%. La otra forma de pensar en esto es que todo el progreso que se ha hecho durante las últimas décadas en términos de convergencia y mejora del nivel de vida en estos países está esencialmente en riesgo. Por eso insistimos tanto en corregir las líneas divisorias que vemos en este momento y que están impulsando estas divergencias, que son el acceso a la vacunación y la capacidad de proporcionar apoyo.

A medida que aumenta la divergencia, ¿Qué importancia tiene acertar con las políticas? Da la sensación de que un error del lado fiscal o monetario podría tener graves consecuencias para una plena recuperación…

Uno de los grandes problemas en este momento es el hecho de que no solo los riesgos a la baja han aumentado, sino que las compensaciones políticas se han vuelto más difíciles. Por poner un ejemplo, hace seis meses no había tanta desconexión entre la inflación y el empleo. Ahora tenemos una situación en la que la inflación y la recuperación del empleo se retrasa. Así que, como banco central, tienes una tarea mucho más difícil para lograr un equilibrio de cómo responder. Nuestro consejo es vigilar de cerca las expectativas de inflación, mirar más allá de los aumentos transitorios de la inflación y estar preparados para actuar si hay alguna señal de que las expectativas se desanclan. Algo similar podría darse en el ámbito fiscal. Gran parte del espacio fiscal ya se ha agotado y es más limitado. Pero al mismo tiempo, si todavía hay problemas sanitarios hay que abordarlos. El espacio político es mucho más limitado. Y el margen para cometer errores está en la mente de todos.

¿La escasez y los cuellos de botella en la cadena de suministro van a ser un riesgo transitorio que empuje la inflación al alza?

Esto es algo que nos ha sorprendido en relación con hace medio año y ha sorprendido a todo el mundo en cuanto a su duración. Pero al mismo tiempo, si uno diera un paso atrás y pensara a qué nos enfrentamos, tal vez no sea tan sorprendente dado que estamos saliendo de un tipo de crisis que nunca habíamos visto. Existen desajustes entre la oferta y la demanda. Ahora la demanda está subiendo, pero la oferta no es capaz de seguir su ritmo y eso se debe en parte también al impacto que todavía deja la pandemia en varios países. Hay una verdadera incertidumbre intrínseca en cuanto a cómo van a desarrollarse algunas de estas cosas. En nuestras previsiones asumimos que los desajustes se resolverán en algún momento del próximo año, pero ciertamente hay riesgos con su correspondiente impacto en la inflación y también en la actividad económica.

"No estamos, ni mucho menos, en un entorno en el que vayamos a ver estanflación"

¿Ve el FMI algún riesgo de estanflación para las economías avanzadas a medida que disminuyen los estímulos fiscales y monetarios?

Cuando se ven cifras como las que tenemos en este momento para el crecimiento mundial, incluso teniendo en cuenta que hubo un colapso en la producción, son cifras realmente altas. El crecimiento mundial se situará en el 5,9% en 2021 y el año que viene se habla de un 4,9%. Aunque hay riesgos a la baja y podríamos ver cifras más bajas y una inflación más alta si algunos de estos riesgos se materializan, no estamos ni mucho menos hablando de estanflación.

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