Los líderes europeos refuerzan su compromiso con las metas sociales

La transformación digital y la transición verde son las coordenadas básicas que repiten como un mantra las instituciones europeas para dirigir la recuperación. Pero la UE también quiere una salida social de la crisis, para no cometer los mismos errores que tras la debacle financiera de 2008. Por eso, los líderes europeos darán un impulso al Pilar Social de la UE, en la primera cumbre que dedicarán exclusivamente a la agenda social en Oporto (Portugal).

El borrador de la declaración que adoptarán, al que tuvo acceso elEconomista, señala que "más que nunca, Europa debe ser el continente de la cohesión social y la prosperidad". Para concretar este compromiso, los líderes destacan la "importancia de seguir de cerca, incluido al más alto nivel" el progreso en la puesta en marcha del Pilar de Derechos Sociales de la UE y los objetivos para 2030.

Uno de los tres objetivos para esta década que marcó la Comisión Europea el pasado marzo es que al menos el 78% de aquellos en edad de trabajar tengan un empleo, una meta ambiciosa pero "realista", dicen desde el Ejecutivo comunitario.

El borrador también subraya la importancia de crear empleos de calidad, de adaptar los modelos de protección social a la revolución digital y de combatir todas las formas de discriminación, además de trabajar "activamente" para reducir la desigualdad salarial entre hombres y mujeres. También presta atención especial a los jóvenes, grandes afectados por la pandemia, y respalda que se añadan nuevos indicadores al PIB para medir el progreso de los países.

La declaración quedó ayer casi lista para su adopción por parte de los líderes mañana por la mañana. Sin embargo, fuentes diplomáticas y comunitarias indicaron que España aún tenía algunas reservas porque quería añadir algunas referencias a los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Las mismas fuentes explicaron que la propuesta de Madrid encontró un respaldo "bastante limitado", por lo que habrá que ver en Oporto cómo se acomoda la demanda española.

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