
El expresident de la Generalitat Carles Puigdemont anuncia que presentarán una demanda en el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) contra la decisión de la Eurocámara de levantarle la inmunidad parlamentaria a él y a los exconsellers Toni Comín y Clara Ponsatí.
Ya no podrán escudarse en su inmunidad de eurodiputados para escapar de la Justicia española. El Parlamento Europeo votó retirarles este privilegio por una amplia mayoría, lo que disparará complicadas derivadas jurídicas y políticas tanto en Bélgica como en España.
El levantamiento de la inmunidad de Puigdemont salió adelante con 400 votos a favor, 248 en contra y 45 abstenciones, mientras que Comín y Ponsatí perdieron la suya por 404 votos a favor, 247 en contra y 42 abstenciones.
El abogado de Puigdemont, Gonzalo Boyé, ratificó el recuso ante el TJUE, pero en declaraciones a TVE , dejó caer que "vamos a hacer otras muchas cosas más". Boyé explicó que "no espera "en absoluto" que tras esto la justicia belga responda positivamente a la extradición dado que es un tema zanjado".
Los tres fugados no perderán la condición de eurodiputados, pero el levantamiento de su inmunidad permitirá reactivar las euroórdenes paralizadas cuando tomaron su escaño. Sin embargo, el procedimiento podría volver a chocar con la Justicia belga, encargada de ejecutar las solicitudes españolas.
Para evitarlas maniobras de obstrucción de la defensa de los tres huidos, el juez instructor ,Pablo Llarena, ha planteado ante el propio TJUE una cuestión prejudicial para que determine el alcance de las euroórdenes dictadas contra el expresident por su papel en el procès, después de que la Justicia belga se negara a entregarle.
Gonzalo Boyé anuncia que recurrirá ante el TJUE y "muchas otras cosas más"
Con ello, Llarena pretende que el TJUE aclare la norma que regula las euroórdenes para que, en base a los criterios que fijen los jueces, quede claro en los casos en los que un Estado miembro puede rechazar la solicitud de otro socio.
Como era de esperar, el levantamiento de la inmunidad levantó una inmensa polvareda de declaraciones políticas, tanto a favor como en contra.
Así, el portavoz de Podemos en el Congreso, Pablo Echenique (formación que voto en contra del levantamiento) señaló que "unirse a PP y Vox en el suplicatorio no es la solución política al conflicto". Mientras tanto e ministro de Política Territorial, Miquel Iceta, reivindicaba la necesidad de reemprender la mesa de diálogo con Cataluña.