Milán
Italia, aliviada por estar a punto de superar la segunda ola de la crisis sanitaria, se prepara para una nueva crisis política. El Gobierno de Giuseppe Conte logró superar el pasado miércoles la difícil votación parlamentaria sobre la reforma del MEDE, el mecanismo europeo de estabilidad que el partido de mayoría relativa, el populista Movimiento 5 Estrellas, ve como una injerencia de Bruselas en las finanzas italianas.
El M5E aceptó votar la medida a condición de que Roma no pida los recursos previstos. Ahora otro partido amenaza con sacudir la estabilidad política del país: Italia Viva, formación fundada por el antiguo primer ministro y líder progresista Matteo Renzi. En un duro discurso en el Senado Renzi pidió participar en el equipo de control que manejará los fondos del Plan de Recuperación, amenazando con retirar su apoyo al Ejecutivo.
Conte había presentado un equipo integrado por los ministros de Economía (Partido Demócrata) y de Desarrollo Económico (Movimiento 5 Estrellas), junto a un grupo de tecnócratas. En caso de crisis de Gobierno, como ha explicado el Presidente de la República Sergio Mattarella, habrá elecciones anticipadas durante la primavera.
