El Gobierno ha decidido suspender las reglas fiscales vinculadas al déficit y a la deuda de todas las administraciones públicas para los años 2020 y 2021, siguiendo la recomendación de la Comisión Europea sobre la suspensión extraordinaria del pacto de Estabilidad. Esto implica dejar sin efecto los objetivos de estabilidad y de deuda pública y no aplicar la regla de gasto en 2020 y 2021.
"Suspendemos las reglas fiscales para los años 2020 y 2021 de forma extraordinaria" para hacer frente a la crisis generada por la pandemia. Así lo ha anunciado la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, al avanzar que la medida persigue poner la "totalidad de los recursos al servicio de las administraciones" para mejorar la atención de los ciudadanos.
Montero ha asegurado que el Gobierno hará efectiva esta suspensión cuando el Gobierno apruebe en el Consejo de Ministros el 'techo de gasto' a sus nuevos Presupuestos Generales del Estado y presente la nueva senda de estabilidad presupuestaria para este año y el siguiente, desglosado por sectores.
También ha matizado que esto no significará que se deje de lado la responsabilidad de España para cumplir en el futuro con la Ley de Estabilidad presupuestaria y financiera. La norma establece en su artículo 3 que "la elaboración, aprobación y ejecución de los Presupuestos y demás actuaciones que afecten a los gastos o ingresos de los distintos sujetos comprendidos en el ámbito de aplicación de esta Ley se realizará en un marco de estabilidad presupuestaria, coherente con la normativa europea".
Esta medida implica que quedan suspendidos los objetivos de estabilidad presupuestaria y de deuda pública para 2020, así como los fijados para el período 2021-2023 aprobados por las Cortes Generales en marzo y que habían quedado desfasados en la situación actual.
A pesar de ello, existirán unos niveles de déficit de referencia que servirán para permitir el funcionamiento presupuestario ordinario de ambos ejercicios. "El Ejecutivo se compromete a seguir reduciendo el déficit público en los próximos años, aunque la prioridad actual es combatir la pandemia, proteger a familias, autónomos y empresas y sentar las bases de la recuperación económica y social", aseguran desde Hacienda.
Medidas concretas
Según indican desde el Ministerio, la suspensión de las reglas fiscales supone que los Planes Económicos Financieros (PEF) presentados por Comunidades Autónomas y Entidades Locales para ambos ejercicios como consecuencia del incumplimiento de los objetivos establecidos para 2019 deben considerarse superados.
La medida también contempla que la exigencia de destinar el superávit para reducir deuda, aun siendo deseable, quedará en suspenso en estos años. Asimismo, los objetivos de estabilidad ya no actuarán como límite en el destino del superávit de las CCAA y EELL para financiar Inversiones Financieramente Sostenibles (IFS).
Otra consecuencia relevante, indican, es que la suspensión de las reglas fiscales permitirá que los ayuntamientos puedan utilizar sus remanentes de tesorería para colaborar en la recuperación económica y social de España.
En cualquier caso, aunque quedan suspendidas todas las limitaciones en materia de cumplimiento de reglas fiscales, deberán mantenerse las medidas de seguimiento y supervisión, imprescindibles para el reequilibro de las finanzas públicas. De hecho, esta suspensión no afecta al cumplimiento de las obligaciones previstas en la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera (LOEPSF), o en otras normas, no vinculadas directamente con las reglas fiscales. Así, se mantienen en 2020 los términos del régimen de autorización de operaciones de endeudamiento de las CCAA y EELL, y se mantienen en vigor las obligaciones relativas al periodo medio de pago a proveedores, así como el control de su cumplimiento.
Desde Hacienda subrayan que el Gobierno considera que, dada la situación actual del tejido productivo, resulta más importante que nunca reducir los plazos de pago a proveedores, y el Ejecutivo está dando facilidades para que las CCAA y EELL accedan a los recursos necesarios que lo permitan. En ese sentido, la ministra de Hacienda ha adelantado que el periodo medio de pago de julio ha descendido en todos los subsectores.