
A falta de una semana para que se apruebe el ingreso mínimo vital y se conozcan todos los detalles de acceso, el Gobierno valora que las ayudas a las familias vulnerables sean compatibles con las que ya están establecidas por las Comunidades Autónomas. Esto implicaría que en las regiones más generosas, como son País Vasco y Navarra, las familias vulnerables con más de dos hijos a cargo podrían beneficiarse de una renta de hasta 2.000 euros.
En el borrador en el que trabaja el Ministerio de la Seguridad Social para terminar de perfilar el ingreso mínimo vital se contempla la posibilidad que las familias beneficiarias sigan disponiendo de ayudas autonómicas. Casi todas las Comunidades cuentan con sus propios programas de renta mínima en distintos niveles asistenciales. Las más ambiciosas por su nivel de cobertura y cuantía son las del País Vasco y Navarra.
La Renta de Garantía de Ingresos, como se conoce a la renta mínima vasca, está dirigida a las personas que no dispongan de ingresos procedentes de rentas de trabajo, cuando su nivel mensual de recursos computables no alcance un nivel mínimo de supervivencia. Establece unos ingresos mínimos de 693 euros si se está en edad de trabajar y de 795,95 euros en el caso de ser pensionistas. La renta crece si la unidad de convivencia la compone más de una persona hasta 985 euros en caso de ser más tres personas en la vivienda y de 1.074 euros en la misma circunstancia para los pensionistas.
En el caso de Navarra se denomina Renta Garantizada y es una prestación subsidiaria y complementaria de cualquier otro ingreso al que se pueda tener derecho. La cuantía a percibir está relacionada con el número de personas que conforman la unidad familiar y con los ingresos computables de la misma. Las cuantías máximas a percibir son 623 euros para cuando la unidad familiar es solo de una persona y de hasta 1.247 euros si hay seis miembros o más.
El borrador del decreto-ley, al que ha tenido acceso El Mundo, se recoge que el ingreso mínimo vital será compatible con el resto de rentas mínimas establecidas por las Comunidades Autónomas. "Este real decreto-ley tiene por objeto la creación y regulación de una prestación (...) sin perjuicio de las ayudas que puedan establecer las comunidades autónomas en el ejercicio de sus competencias", recoge el decreto, que todavía no es definitivo. Las prestaciones autonómicas no se computarán a la hora de determinar los ingresos de la posible familia beneficiaria del ingreso mínimo vital.
Este extremo de compatibilidad de la ayudas implica que una familia perceptora de un ingreso de 1.015 euros mensuales podría complementar la ayuda con la renta autonómica y superar los 2.000 euros en el caso del País Vasco y Navarra.
Fuentes del Ministerio de la Seguridad Social consultadas por elEconomista explican que todavía se está estudiando con las Comunidades Autónomas la forma de coexistencia de las ayudas de ambas administraciones, pero en ningún caso para los beneficiarios supondrá la suma de las dos prestaciones. Se están buscando fórmulas para que uno de los subsidios no se pueda cobrar en su totalidad.
¿Cómo funcionará el ingreso mínimo vital?
La cuantía de las pagas del ingreso mínimo vital irían desde los 462 euros en caso de que sea un adulto el perceptor del ingreso mínimo vital hasta los 1.015 euros mensuales en caso de tratarse de dos adultos con más de dos hijos a su cargo los beneficiarios de la ayuda. En este sentido, el borrador de la norma prevé rentas de 700 euros mensuales para un adulto con hijo a cargo; 838 euros en caso de ser un adulto con dos hijos a cargo; y de 977 euros para un adulto con tres o más hijos a cargo.
En el caso de ser dos cabezas de familia, a parte del caso mencionado en el que se concedería la ayuda de 1.015 euros, si los beneficiarios son dos adultos sin hijo a cargo la ayuda ascenderá hasta los 600 euros al mes; hasta los 738 euros en caso de ser dos adultos con un menor a cargo; 877 euros si se trata de dos adultos con dos hijos a cargo; mientras que si se trata de tres adultos sin cargas se prevé una ayuda de 730 euros y de hasta 877 euros para tres adultos con un menor a cargo u otros modelos de familia. Fuentes del Gobierno apuntan que estas cifras podrían sufrir alguna modificación en el texto final.
Como avanzó elEconomista los perceptores se encontrarán sujetos a un peritaje individual que incluye pruebas de renta y justificantes de búsqueda de empleo de los miembros del núcleo familiar donde va a entrar esta ayuda para beneficiarse de ella.