Los empresarios españoles ya están acostumbrados a la desaceleración económica tras este período de incertidumbre política, en una situación de 'singobierno' en España durante casi dos años. El informe que realiza KPMG desde 2009 en los últimos cuatro años se ha elaborado en colaboración con la CEOE y en esta edición han participado 2.037 empresarios y directivos de un total de 25 sectores diferentes y de las distintas comunidades autónomas. El 55% de los empresarios españoles calificaban de regular la situación de la economía española, mientras que un 59% piensa que la situación irá a peor. Es un porcentaje superior al 48% del año pasado. En cuanto a inversión el 42% (49% el año pasado) prevé aumentar sus inversiones; mientras un 18% (15% el año pasado) contempla recortarlas. Además, el 44% de los encuestados afirma que la situación política frenó sus inversiones, frente al 31% del año pasado.
Para Hilario Albarracín, presidente de KPMG en España, "La visión de los empresarios españoles sobre la economía para 2020 es cauta. Aunque un 59% estima que la economía española en su conjunto empeorará en los próximos 12 meses, un porcentaje similar (58%) también espera incrementar ventas, manteniendo plantilla e inversión. En este contexto, las herramientas tecnológicas, la contratación y la formación de los trabajadores aparecen entre las prioridades de inversión de los directivos para los próximos meses".
Por parte de CEOE, su presidente, Antonio Garamendi, afirma que "el informe deja claro que el parón político que vivimos en 2019 ha pasado factura a las decisiones de inversión de muchas empresas por lo que, ahora que tenemos un Gobierno formado, es el momento de ponerse en marcha y tratar de llevar a cabo las reformas que realmente necesita España".
En el marco de desaceleración, los empresarios confían en la resiliencia de sus organizaciones y creen que el volumen de negocio evolucionará bien en 2020, aunque se muestran moderados respecto a la edición anterior. A pesar de ser encuestados antes de la crisis sanitaria del coronavirus, la mayoría de los directivos y empresarios (58%) espera un crecimiento de las ventas en 2020, cifra ligeramente inferior al 69% de la pasada edición.
En cuanto a la política económica los empresarios y directivos califican como "neutras" la mayoría de las medidas adoptadas por el Gobierno. En cambio, un 71% de los empresarios encuestados cree que la subida de cotizaciones tuvo un impacto negativo, así como el registro de jornada (46%).
Del mismo modo, el 72% piensa que la situación política en su negocio ha tenido un impacto negativo en 2019 (por encima del 67% del año pasado). De este 72%, un 62% dice que paralizó sus decisiones de inversión, muy por encima del 47% del año pasado. Este 62% supone el 44% del total de la muestra de empresarios encuestados. Otro 37% (versus el 26% anterior) apunta que ha retrasado normativas que afectaban a su compañía y un 33% reconoce que se paralizaron decisiones de contratación de personal, 11 puntos más que el año pasado (22%). La mayoría coincide también en señalar que esto afecta a la imagen de nuestro país.
Preguntados por las prioridades que debería tener el Gobierno este año en materia económica, señalan por este orden, la eficiencia del gasto público, las reformas estructurales y la reforma del sistema educativo. Para las administraciones autonómicas, las prioridades deberían ser la eficiencia del gasto público, la disminución de la presión fiscal y la simplificación administrativa, según las respuestas recabadas este año.
En cuanto a las pymes, y teniendo en cuenta que conforman el grueso de la estructura empresarial española, lograr su crecimiento y desarrollo es uno de los retos estructurales para mejorar la economía del país. La encuesta incluye por primera vez una pregunta sobre cuáles son los principales obstáculos que limitan el crecimiento de las pequeñas y medianas empresas en España, las respuestas dadas por los encuestados ubican sobre todo en las trabas administrativas y regulatorias, la rigidez del mercado laboral y las cargas fiscales.
Mención aparte merecen las valoraciones en materia de diversidad e igualdad de genero. En este sentido, al tiempo que las grandes compañías se otorgan una nota media en diversidad de género del 8,2 sobre 10, las iniciativas para impulsar la igualdad de género por parte del Gobierno en 2019 son las mejor valoradas por las empresas en nuestro país, de entre todas las medidas políticas desplegadas por el Ejecutivo.
Transición tecnológica
Actualmente hay pocas empresas que, de una manera u otra, no hayan iniciado el proceso de transformación digital. "Cambian las tecnologías y la velocidad a la que se generan nuevas o se mejoran las aplicaciones de las existentes, pero la transformación digital en sentido amplio ha llegado para quedarse y las empresas son conscientes de que tienen que ponerla en el centro de su estrategia", comenta Hilario Albarracín. los directivos respondieron en qué escala de 0 a 10 colocaría el grado de digitalización de sus empresas. La nota media de las empresas españolas en digitalización es de un 6,4, es decir, que apenas acaban de cruzar el ecuador del proceso de tansformación digital y todavía tienen por delante un largo camino. La mayor parte de las empresas (54%) se sitúan entre el 6 y el 7 en la escala. Como no podía ser de otra manera, los sectores más avanzados en la digitalización son los de Tecnología, Fintech y Telecomunicaciones, seguido muy cerca por la Banca. Por funciones dentro de la organización, Tecnologías de la Información (TI), Finanzas y Atención al cliente son las áreas más digitalizadas de las empresas dentro de nuestro país.