
La demanda de crédito por parte de hogares y empresas se ha reducido en España durante el tercer trimestre, lo que no ocurría desde mediados de 2013, debido a varios factores, entre ellos una menor confianza de los consumidores respecto a la situación económica. En 2013 España acumulaba varios trimestres de recesión tras sufrir de lleno la crisis de deuda soberana que golpeó a la zona euro durante 2011 y 2013.
El Banco de España ha publicado este martes la 'Encuesta sobre Préstamos Bancarios', elaborada a partir de las respuestas de diez instituciones españolas, que desvela que la banca prevé que la demanda de crédito siga cayendo en el caso de las empresas para el trimestre en curso, según recogen desde la agencia Efe.
Se ha visto una caída de la demanda pero también un aumento del endurecimiento de los criterios para conceder crédito, por ejemplo, a las pymes y a los hogares para consumo.
"Atendiendo a los factores que estarían detrás de esta evolución, los mayores costes relaciones con el nivel de capital y un empeoramiento de las expectativas, tanto sobre determinados sectores y empresas como respecto a la situación económica general, habrían favorecido un endurecimiento de los criterios". La banca empieza a imponer una prima sobre su crédito ante un posible aumento de la morosidad en tiempos revueltos.
En el caso de los créditos a familias para consumo, esta mayor restricción de los bancos "se produjo principalmente como consecuencia de un aumento en la percepción de riesgos y una menor tolerancia de las entidades a a estos".
Aumentará el crédito para vivienda
Por el contrario, estima que aumentarán las solicitudes de financiación para la adquisición de vivienda y se estabilizará la de consumo y otros fines.
Pese a la caída de la demanda de crédito en España, en el caso de los hogares, las condiciones aplicadas a la financiación para vivienda se relajaron ligeramente en el tercer trimestre debido principalmente a una mayor competencia en el sector, según la encuesta.
"La demanda de fondos para la adquisición de vivienda se redujo durante el tercer trimestre", explica la fuente y añade que "según las entidades, los factores que explicarían este descenso serían, sobre todo, la menor confianza de los consumidores y los cambios regulatorios" tras la entrada en vigor el pasado junio de la nueva ley hipotecaria.
El empeoramiento de las perspectivas en el mercado de la vivienda, el aumento de la financiación con fondos propios y el mayor uso de préstamos de otras entidades explicarían esta caída, aunque en menor medida, añade.
En el caso del crédito al consumo y otros fines, la demanda por parte de las familias españolas se redujo también ligeramente debido la menor confianza de los consumidores, a un menor gasto en bienes de consumo duradero y a un mayor uso de préstamos de otras entidades, según la fuente. Las familias están optando por incrementar sus ahorros a modo de precaución ante la previsión de una desaceleración de la economía.
Este tipo de crédito tuvo un ligero endurecimiento en los criterios de aprobación, según la encuesta. En cuanto a las empresas, el informe indica que al igual que en el caso de los hogares, la demanda de fondos se redujo entre julio y septiembre, tanto en el caso de las pymes como en las compañías de mayor tamaño.
En este caso, el descenso de la demanda habría sido consecuencia principalmente, según la fuente, de las menores inversiones en capital fijo, del mayor uso de préstamos de otras entidades y de fuentes de financiación no bancaria (valores de renta fija, emisión de nuevas acciones y financiación interna).
El descenso de solicitudes para financiar existencias y capital circulante influyó también, aunque en menor medida, según la encuesta.
Tipos de interés
En cambio, tanto el reducido nivel de los tipos de interés como el impacto de algunas operaciones de reestructuración empresarial habrían impulsado al alza las peticiones de nuevos fondos, lo que compensó parcialmente la evolución contractiva de la demanda, explica la fuente.
En el caso de las estas sociedades, los criterios de aprobación de préstamos se mantuvieron sin variaciones significativas, aunque se evidenció "un cierto endurecimiento de los criterios aplicados a las pymes", añade.
El artículo desvela también que las condiciones de acceso a los mercados financieros mayoristas y minoristas por parte de las entidades se mantuvieron estables o habrían mejorado durante el trimestre.
"El programa ampliado de compra de activos del Banco Central Europeo (BCE) habría seguido teniendo un efecto positivo sobre la liquidez y las condiciones de financiación de los bancos durante los últimos seis meses, si bien habría tenido un impacto negativo sobre la rentabilidad de las entidades de la eurozona", añade el informe.
De la misma manera, este programa habría seguido favoreciendo, en casi todos los segmentos, una relajación de las condiciones de los préstamos y un incremento del volumen de crédito concedido, según la fuente.