
No es el primer refregón que sufre la reforma de la pensiones del PP de 2013 desde que esta fuese aprobada, pero las declaraciones del presidente de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), José Luis Escrivá, a cuenta del índice de revalorización de las pensiones del 0,25%, el cual califica de "deficiente", implantado entonces supone el apuntalamiento a un fracaso que el propio Gobierno de Mariano Rajoy reconoció al incluir en los Presupuestos Generales de 2018 una subida de las pensiones en relación al IPC con vigencia de dos años y la demora en la aplicación del denominado como Factor de Sostenibilidad.
"El tema de las pensiones es vital para el futuro de la sociedad española. Entre otros aspectos que afectan a la Seguridad Social la AIReF es garante del cómputo del Indice de Revalorización de las Pensiones (IRP) y al profundizar en su funcionamiento, cuando se puso en marcha, nos dimos cuenta de las deficiencias y de que era impracticable. Había casos en los que la aplicación suponía una pérdida de poder adquisitivo del 30%", señaló Escrivá durante la presentación del encuentro sobre la Sostenibilidad en el Sistema de Pensiones celebrado en el marco de los 'Diálogos Servimedia'.
En sentido, el presidente de la AIReF reconoce los desequilibrios financieros que adolece el Sistema si bien asegura que estos son "manejables" a pesar de que el déficit de la Seguridad Social se mantiene estable en el entorno de los 18.000 millones de euros anuales, a pesar de unas tasa de creación de empleo muy por encima del potencial de crecimiento de la economía española, del 3% de media.
Edad 'efectiva' de jubilación en 67 años
Uno de los aspectos de la futura reforma que desde la AIReF ven recorrido para modificar es la edad de jubilación y, más concretamente, la edad efectiva de retiro del mercado laboral. Escrivá hizo hincapié al respecto en la necesidad de profundizar en la reforma de las pensiones del año 2011, de forma que la edad efectiva de jubilación pase de los 62,7 años actuales a los 67, ya que permitiría corregir "más de la mitad del problema de gasto". Además, sugirió continuar avanzando en el periodo de cálculo de las pensiones hasta que se tenga en cuenta toda la vida laboral, frente a los últimos 25 años que fijó la reforma de 2011, puesto que también permitiría subsanar una "parte importante" del problema.
También indicó Escrivá que si los ingresos por cotizaciones sociales solo se usasen para abonar prestaciones por contingencias comunes, y no para otras políticas sociales que deberían asumirse vía Presupuestos, se podrían corregir hasta dos puntos del déficit de la Seguridad Social. Se trataría de determinados "subsidios cruzados" que deberían financiarse vía impuestos con las cuentas públicas, junto a costes administrativos del funcionamiento del sistema de la Seguridad Social, con un coste aproximado de 4.000 millones de euros. "Si lo trasladamos, no habría déficit y estaría en situación de equilibrio o ligero superávit", ha asegurado.
Mantener poder adquisitivo y elevar ingresos
En este mismo acto los sindicatos apuntaron la necesidad de elevar los ingresos del Sistema para garantizar el pago de unas prestaciones que sean suficientes y sirvan para mantener el poder adquisitivo de los pensionistas en la futura reforma que realice el Gobierno a partir de las recomendaciones del Pacto de Toledo.
"El mantenimiento del poder adquisitivo es un rasgo clave del Sistema. Si no se cumple, se rompe el elemento esencial de contributividad. Sin embargo, subir las pensiones con el IPC tiene un coste, por lo que hay que tomar medidas para incrementar los ingresos", explica el Secretario Confederal de Políticas Públicas y Protección Social de CCOO, Carlos Bravo.
Por su parte, Secretaria de Políticas Sociales, Empleo y Seguridad Social de UGT, Mari Carmen Barrera, criticó la reforma laboral del PP de 2012 como principal causante de la tendencia de endeudamiento del sistema de pensiones por carecer de mayores ingresos, o al menos de los suficientes para enjugar el déficit, a pesar de que se han recuperado los niveles de afiliación precrisis aunque sin su reflejo en términos de cotizaciones sociales.
"Estamos trabajando en una propuesta de ley sustentada por todos los partidos políticos para que la revalorización de las pensiones sea la primera ley que se apruebe en el Congreso en enero cuando haya un Gobierno", señalaba Barrera recordando que si las cosas continúan como están el IRP operará el próximo año, con la subida del 0,25%, ya que "estando el Gobierno en funciones no hay herramientas para llevarlo a cabo".