
La economía de Estados Unidos generó en agosto un total de 130.000 puestos de trabajo, según los datos publicados el viernes por el Buró de Estadísticas Laborales (BLS) del Departamento de Trabajo. La tasa de desempleo se mantuvo en el 3,7%.
El consenso esperaba la creación de al menos entre 150.000 y 160.000 empleos y que la tasa de paro se mantuviera en el 3,7%. Es importante tener en cuenta que este se postula como la última referencia del estado del mercado laboral antes de la próxima reunión del Comité Federal de Mercados Abiertos de la Reserva Federal (FOMC) el próximo 17 y 18 de septiembre.
Al mismo tiempo, se revisaron a la baja los datos de junio y julio, cuando se registraron 20.000 empleos menos de lo previsto previamente. Tras estos ajustes, la creación de puestos de trabajo han logrado una media mensual de 156.000 empleos en los últimos tres meses.
La tasa de participación en la fuerza laboral subió hasta el 63,2% en agosto mientras los salarios aumentaron en 11 centavos hasta 28,11 dólares, tras los incrementos de 9 centavos en junio y julio. En los últimos 12 meses, la inflación salarial ha aumentado un 3,2%.
Pese a que a principios de año, la economía estadounidense registró cierto debilitamiento en lo que a la creación de puestos de trabajo se refiere, el empleo a este lado del Atlántico ha aumentado a un ritmo consistente con el crecimiento potencial del país. En lo que llevamos de año, contando con el dato de agosto, EEUU ha creado una media de 158.000 empleos mensuales por debajo de los 223.000 generados al mes el año pasado.
Como viene siendo costumbre, el empleo público y el sector de la salud fueron los pilares que apoyaron la creación de puestos de trabajo el pasado mes. El gobierno federal aumentó creó 28.000 empleos, principalmente por la contratación de trabajadores temporales para prepararse para el Censo 2020. El sector sanitarió añadió 24.000 empleos y acumula ya 392.000 en los últimos 12 meses.
No obstante, el empleo en la industria minera destruyó 6.000 empleos mientras el sector minorista perdió alrededor de 11.000 puestos de trabajo. Por otro lado, se registraron pocos cambios en otras áreas como la construcción, las manufacturas, el transporte, ocio y hospitalidad.
"La salud del mercado laboral continúa siendo sólida, aunque en adelante podríamos ver cierta debilidad en el sector manufacturero", explica Veronica Clark, economista de Citi. Es importante recordar que el pasado mes, la actividad manufacturera del país se contrajo por primera vez desde 2016, según los datos dados a conocer por el Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM).
No obstante, los empleos manufactureros no son un componente sustancial del mercado laboral total, y otros indicadores, incluido el componente de empleo del ISM no manufacturero, que se mantuvo el mes pasado en niveles expansivos, lo que apoya que la economía siga manteniendo un ritmo de crecimiento laboral sostenible.
Tampoco hay que olvidar como el jueves, la gestora de nóminas ADP indicó como en agosto el sector privado sumó 195.000 empleos. Al mismo tiempo, otras referencias que apuntan al optimismo, llegan desde la Conference Board, donde el porcentaje de consumidores que indica que los trabajos son abundantes frente a los que consideran que es difícil encontrar un empleo aumentó hasta el 39,4%, su nivel más alto desde noviembre del 2000.
Tras darse a conocer los datos de empleo, el 91,2% del mercado sigue proyectando una rebaja de 25 puntos básicos en el precio del dinero el próximo 18 de septiembre, cuando concluya la reunión de dos días de política monetaria de la Fed, según el indicador FedWatch de la CME.