Madrid
El ingreso mínimo vital que está diseñando el Gobierno del PSOE a pesar de estar en funciones tendrá un aspecto similar al de las propuestas elaboradas por la AIReF y los sindicatos, y atendiendo al análisis del reparto autonómico elaborado por la autoridad fiscal, no todas las regiones contarán con el mismo volumen de beneficiarios. Ni, por lo tanto, se dedicarán a la medida el mismo volumen de recursos económicos. En este sentido, según una aproximación a la medida que pretende elaborar el PSOE, Andalucía coparía de largo la mayor parte del coste de la ayuda a nivel nacional -influida por un mayor volumen de familias en riesgo de pobreza y la tasa de paro más alta del país en el 21%-, concretamente algo más de 2.000 millones de euros cada año, lo que significa casi un 30% de todo el dinero destinado a la ayuda.
Y más allá, según los cálculos de la AIReF basados en los niveles de gasto, cobertura y volumen de beneficiarios en las diferentes regiones, hasta el 66% del coste de la medida en su reparto autonómico iría a sufragar los gastos en la Comunidad de Madrid, Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía. Es decir, solo estas cuatro regiones coparían 4.752 millones de euros de los 7.200 millones anuales que, como mínimo, costaría implantar este sistema en nuestro país.
Estas regiones serían las más beneficiadas por la eventual introducción de la medida, si bien se presupone que a su vez serían las más necesitadas en términos de cobertura de las situaciones de pobreza. Como recuerda AIReF en su informe sobre Los programas de ingresos mínimos en España. Una evaluación de la Iniciativa Legislativa Popular, en todas las comunidades autónomas creció el número de beneficiarios con la crisis, pero fue más pronunciado en las que partían de niveles más bajos, como Extremadura, Murcia y La Rioja, que en la actualidad cuentan con una media 67, 39 y 91 beneficiarios de estos programas de renta por cada 10.000 habitantes, cifras que significan un incremento significativo desde el año de inicio de la crisis (2008), cuando estos niveles eran testimoniales con 10, 3 y 8 beneficiarios por cada 10.000 habitantes.
Sin embargo, País Vasco, Andalucía, Cataluña y Madrid -estas tres últimas también incluidas entre las cuatro más beneficiadas por la nueva renta- siguen acumulando el 55% de los beneficiarios de estos programas, una cifra que llegaba al 75% antes de la crisis.
De los cerca de 1.500 millones anuales que se gastan todas las autonomías en estas prestaciones, cerca de dos tercios corresponden al presupuesto ejecutado en País Vasco (33%), Cataluña (12), Madrid (11) y Asturias (7), cifra con mayor peso en su conjunto que el que tienen estas comunidades autónomas en número de hogares beneficiarios.
En este punto, y al tratarse de programas de rentas gestionados por los diferentes gobiernos autonómicos, la AIReF advierte de las diferencias "muy marcadas" en la protección ofrecida por cada región.
Diferencia de cobertura
Mientras que algunas comunidades presentan ratios superiores al 100%, en otras la relación no llega al 10%. En el primero de los grupos están el País Vasco, Asturias y Navarra. A partir de estas tres comunidades se produce un salto, ofreciendo solo otras cuatro comunidades una cobertura superior al 50%. En el resto de los casos, la cobertura es muy limitada, destacando los porcentajes inferiores al 25% de Castilla-La Mancha y Andalucía.
En este sentido, en cuanto a la nueva ley, el número de beneficiarios y su coste fiscal estarán muy relacionados con el nivel de desempleo de larga duración. En base a la Encuesta de Condiciones de Vida del INE se aprecia cómo tanto el número de beneficiarios como el coste fiscal se dispara desde el inicio de la crisis, pasando de 272.000 en 2008 a 1.929.000 en 2014. Asimismo, la proyección para los próximos años es de una reducción de beneficiarios y del coste fiscal.
Por tipo de hogar, los hogares beneficiarios con más de un adulto y sin hijos son el principal colectivo, aunque no alcanzan el 50%. Si se analizan las características de los actuales beneficiarios se observa cómo los eventuales 1,2 millones de beneficiarios de la nueva medida (titulares mayores de 18 años) se encuentran en 1,1 millones de hogares, una diferencia que deviene del hecho de que hay hogares con más de un titular con derecho a percibir la ILP (por debajo de 500.000 hogares).
Los vascos reciben un 60% más de ayuda que los murcianos
Uno de los elementos que podría combatir la introducción una renta mínima a nivel nacional y de carácter centralizado es la heterogeneidad existente entre los niveles de cobertura y cuantía de las prestaciones asistenciales en las diferentes comunidades autónomas.
Concretamente, atendiendo al actual sistema de ingresos mínimos en el que se encuadra la ayuda autonómica, los beneficiarios del País Vasco de este tipo de renta reciben un 60% más que los murcianos. Concretamente, los vascos perciben 726,47 euros mensuales, mientras que en el caso de Murcia, la que menos cuantía otorga, esta se encuentra en los 300 euros.
En el top 5 y por detrás de los vascos, entre los que mayor cuantía reciben están los navarros, cuyas cuantías alcanzan los 707 euros mensuales, seguidos de los catalanes con pagas de hasta 564 euros, los beneficiarios de Melilla, que perciben 509 euros y los canarios, con 476 euros cada mes.
Precisamente, en este margen entre los 400 y los 500 euros se encuentran la mayoría de las regiones, concretamente 12 de las 19, es decir, más de un 60% de ellas.
Aquí se encuentran ubicadas algunas autonomías -a parte de las Islas Canarias- como los aragoneses cuya renta alcanza los 472 euros al mes, seguido de los habitantes con mayores necesidades de Castilla-La Mancha con 456 euros y de los asturianos con 442 euros de renta.
Las pagas más bajas
En este grupo también se encuadran con cuantías similares, en el entorno de los 430 euros, otras comunidades autónomas como Baleares, Cantabria, Castilla y León, y Extremadura -todas ellas a excepción del archipiélago- al calcular la paga sobre el 80% del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples con 14 mensualidades.
En el grupo de las regiones menos generosas están: Andalucía (419 euros), Galicia y La Rioja con 403 euros mensuales en ambos casos y la Comunidad de Madrid (400 euros), si bien las rentas mínimas más escasas se otorgan en la Comunidad Valenciana con 389 euros, y Ceuta y Murcia con 300 euros.
