Economía

Alemania podría abandonar su obsesión por el equilibrio fiscal para endeudarse contra el cambio climático

  • Alemania lleva siete años sin déficit público y reduciendo su deuda
  • Desde Bruselas piden que los países que tengan margen gasten más
Angela Merkel, canciller de Alemania

Alemania está evaluando efectuar un giro en su política fiscal y abandonar su preciado equilibrio presupuestario para emitir nueva deuda y financiar un costoso paquete de protección climática, según ha revelado un alto funcionario gubernamental a Reuters a cambio de mantener su identidad en el anonimato.

"El desafío actual es cómo modelar un cambio tan fundamental en la política fiscal sin abrir las compuertas del presupuesto federal", explica el funcionario, que está al tanto de las discusiones internas en el Ministerio de Finanzas.

"Porque una vez que quede claro que la nueva deuda ya no es un tabú, todo el mundo levantará la mano y pedirá más dinero", explica este experto que quiere mantenerse en el anonimato.

Sólo por el cambio climático

Por eso Berlín relacionaría y limitaría cualquier emisión de deuda estrictamente al paquete de protección climática que se espera apruebe el gabinete de la canciller Angela Merkel el mes próximo.

Aunque el paquete esté limitado a programas para reducir la contaminación y suavizar el cambio climático, este giro podría marcar un antes y un después en Alemania y Europa. El Banco Central Europeo y la Comisión Europea llevan años pidiendo a los países que tienen margen (Alemania, Holanda y Austria entre otros) que incremente su gasto público para estimular la demanda y facilitar a los países de la periferia la prolongación del equilibrio exterior. 

Hasta hoy, Alemania se había negado a incrementar su gasto público por encima de los ingresos, logrando así varios superávits fiscales que han venido acompañados de importantes reducción de la deuda pública del país. 

Aunque es un paso relevante, esta idea surge justo cuando la economía alemana muestra un evidente deterioro tras años de sólido de crecimiento. El estímulo fiscal podría ser un medida procíclica para compensar la ralentización económica, pero también podría ser visto como un enemigo entre los economistas alemanas que ven el déficit público como uno de los grandes males.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky