Con un clima adverso de oposición por parte de la mayoría de los clubes europeos, la UEFA (apoyada por la Asociación de Clubes Europeos, la ECA) pretende remodelar de manera sustancial la joya de la corona de las competiciones continentales, la Champions League. El plan de ambas instituciones es convertirla en un torneo de acceso restringido en el que 24 de sus 32 integrantes fuesen fijos y el resto se fiasen a una especie de ascensos y descensos en un sistema de tres divisiones. Y el grueso de las escuadras se opone vehemente y ya tiene un plan que presentar para contrarrestar esa reforma.
De acuerdo con The Times, la estrategia de los clubes es forzar a la UEFA a aumentar el número de participantes hasta 40 o 48. El objetivo, compensar en cierta medida la posible fijación de esas 24 plazas y evitar que las ligas nacionales perdiesen ese protagonismo que actualmente ostentan proporcionando acceso a la Champions.
El momento para hacer esta contraoferta será el 11 de septiembre, fecha en la que se reúne la ECA. Su presidente, Andrea Agnelli, también presidente de la Juventus, es uno de los máximos defensores de esta reforma.
Contra ella se han posicionado las grandes ligas europeas, especialmente la Premier League y LaLiga. Si bien el trofeo inglés declaró su disconfomidad por unanimidad, en el español hay más dudas: al 'sí' de Real Madrid y Barcelona al nuevo formato se podría unir el de un Atlético de Madrid que al principio se habría posicionado en contra.
Esta mayoría de rechazo al proyecto de reforma se saldó con la ausencia de un punto de encuentro en la reunión de la ECA de la pasada semana y el emplazamiento a la presentación de nuevas propuestas de cara a septiembre. Los clubes europeos ya la tendrían la suya.
