La intención por parte de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) de disputar la Supercopa de España en Arabia Saudí el próximo mes de enero ya tiene a sus primeros detractores. Tanto LaLiga como el Gobierno han manifestado su oposición al tratarse de un país donde no se respetan los derechos de las mujeres.
Este pasado viernes, la ministra de Educación en funciones y portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, cuestionó la Supercopa en Arabia Saudí: "Nosotros defendemos la igualdad de las mujeres y de los hombres y la igualdad de género, la llevamos en nuestro programa. Hay cuestiones todavía por resolver socialmente, mundialmente, globalmente, y ésa que usted apunta puede ser una", comentó.
LaLiga ha confirmado a elEconomista que se opondrá por todos los medios a que la Supercopa se juegue del 8 al 12 de enero en Arabia Saudí, alegando cuestiones económicas. Por tanto, la polémica está servida a poco más de tres meses para la disputa de un título en el que estarán Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid y Valencia.
Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, pidió hace unos días a las diferentes federaciones que se negasen a jugar partidos en países donde las mujeres tienen prohibido acudir a los estadios de fútbol. "El Comité Ejecutivo recomendará a las 55 asociaciones nacionales y a todos los clubes europeos que no jueguen partidos en países en los que las mujeres tengan acceso restringido a los estadios", declaró.
El 18 de enero de 2018, por primera vez en la historia, las mujeres saudíes pudieron asistir a ver un partido de fútbol en directo, pero fueron acomodadas en una zona sin hombres. Aunque hay ciertos aires de aperturismo, en Arabia Saudí aún prima la separación de los sexos en lugares públicos.
En enero de 2019, la Serie A llevó la Supercopa italiana entre Juventus de Turín y AC Milan a Arabia Saudí, provocando por aquel entonces una gran polémica.