Comsa Corporación saldrá de Polonia el próximo mes de abril con la venta del 32,85% que controla de su otrora filial en el país Trakja. La compañía acometerá esta desinversión con el objetivo de avanzar en el plan de refinanciación de su deuda acordado el año pasado con la banca. El valor de la participación de la constructora española en la compañía polaca, a los precios de mercado actuales, asciende a casi 11 millones de euros.
Comsa terminará así su aventura polaca, iniciada en 2005, cuando tomó el 34% de Trakcja. Dos años más tarde elevó su participación hasta el 60%, convirtiéndose así en el accionista de control de la compañía. No obstante, desde 2019 la empresa catalana rebajó su posición, desconsolidando así la filial de sus cuentas. La constructora que preside Jorge Miarnau es hoy el primer accionista con el 32,85%.
La salida de Comsa de su participada se hará efectiva previsiblemente a mediados de mayo
En la primavera de 2021, Comsa llegó a un acuerdo con el otro accionista de referencia de Trakcja, la empresa pública Agencja Rozwoju Przemyslu (ARP), tenedora del 18,64% del capital, para vender sus acciones y los bonos que tiene el grupo catalán asociados a la constructora polaca a un precio, para ambos casos, de 1,70 zlotys por título. La suma total asciende a 55,9 millones de zlotys, lo que supone 12,3 millones de euros. La transacción se articulará a través de una ampliación de capital, sin derecho de suscripción para los actuales accionistas, por parte de Trakcja por 250 millones de acciones que serán suscritas íntegramente por el administrador ferroviario de Polonia, también público, PKP Polskie Linie Kolejowe, erigiéndose así en el accionista de control de la compañía. Para ello Trakcja ha convocado una junta extraordinaria de accionistas que se celebrará el próximo 8 de abril. Una vez aprobada la ampliación, su materialización y, por tanto, la salida de Comsa de su participada se hará efectiva previsiblemente a mediados de mayo.
Comsa refinanció el pasado verano su deuda fijándola en 182 millones con vencimiento en 2026. Para amortizarla, el grupo prevé mejorar sus resultados y seguir vendiendo activos. Al margen de Trakcja, en 2021 traspasó, junto con Sabadell y Avançsa, la termosolar Les Borges Blanques a Q-Energy.