
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha cancelado su agenda de la tarde-noche de este lunes tras comparecer durante casi todo el día en el juicio del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que le ha juzgado por presunta desobediencia al haber ignorado las órdenes de la Junta Electoral Central (JEC) de retirar símbolos partidistas de los edificios de la administración catalana en el periodo electoral de primavera. Entre dichos eventos está la gala anual de la patronal catalana Foment del Treball.
Sin embargo, el Govern ha sido protagonista del discurso del presidente de la patronal catalana, Josep Sánchez Llibre, quien ha criticado los disturbios de las últimas semanas en Cataluña y ha afirmado que "no condenar la barbarie y no evitarla es una grave irresponsabilidad del Govern". "Querer perjudicar la economía, como afirman los protagonistas de esta barbarie, necesita una respuesta rápida y eficiente de las autoridades", ha añadido.
Además, Sánchez Llibre ha abogado por que el Govern y el Gobierno español deben "recuperar" su relación institucional, y ha recalcado que la solución al conflicto político debe pasar por la negociación y el acuerdo.
El líder de la patronal catalana también ha llamado a reactivar las instituciones y no "demorar más la gobernación y la toma de decisiones". En este sentido, considera "una buena noticia" el acuerdo de gobierno entre PSOE y Podemos, pero les ha pedido "no dar marcha atrás" en algunas reformar que han sido positivas, indicando que "más presión fiscal sería un error y un freno al progreso".
Una ausencia por protocolo
Según Europa Press, la ausencia de Torra en la cena de Foment responde a un conflicto de protocolo con Moncloa, de forma que Nadia Calviño quedaba en el acto por encima de Torra a nivel protocolario.
En sustitución de Torra ha asistido el vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès –que igualmente había confirmado su asistencia-, que ha pedido al Gobierno central recuperar el "camino" de la Declaración de Pedralbes del año pasado –que se produjo horas antes de la entrega de premios anual de la patronal catalana- para retomar el diálogo entre ambas instituciones como solución al conflicto en Catalunya.
Lo ha dicho en la ceremonia de entrega de los Premios Carles Ferrer Salat y las Medallas de Honor de Foment del Treball, a la que también han asistido las ministras en funciones Nadia Calviño, Margarita Robles y María Jesús Montero, y la delegada del Gobierno en Catalunya, Teresa Cunillera.
Asimismo, han acudido los consejeros catalanes Àngels Chacón, Damià Calvet y Chakir el Homrani, y el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni.
Réplica de Calviño
En su discurso, Calviño ha instado a todas las administraciones públicas a actuar "con responsabilidad" para garantizar la "estabilidad política y social" que necesita España y que considera un elemento clave para generar riqueza.
En el primer acto público en el que coinciden miembros del Govern y del Ejecutivo central en funciones tras las elecciones generales del pasado 10-N y en plena negociación para la investidura, la ministra ha insistido en la necesidad de las "posturas dialogantes y constructivas" para avanzar en todos los terrenos, según Efe.
Tras recordar el preacuerdo suscrito entre el PSOE y Podemos para cerrar un gobierno de coalición, Calviño ha emplazado también al conjunto de fuerzas políticas a "asumir su responsabilidad y sumarse a esta mayoría".
Por su parte, el primer teniente de alcaldía del Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni (PSC), ha llamado en su turno de palabra a apostar por "el diálogo, la capacidad de llegar a acuerdos, la estabilidad política y seguridad jurídica y, por tanto, las certezas".
Ha reivindicado que Barcelona "va razonablemente bien" pese a la complicada situación política y ha afirmado que la capital catalana "es un motor que no ha parado ni parará nunca". "Porque queremos que gane Barcelona, que gane Cataluña y que gane España", ha añadido.