Madrid
Banco Sabadell sacará pronto otro conejo de la chistera para exhibir ante sus accionistas el potencial financiero de su proyecto en solitario y defenderse así de la opa lanzada por el BBVA. La entidad vallesana ha avanzado este miércoles que prevé presentar su plan estratégico para el periodo 2025-2027 el próximo 24 de julio, coincidiendo con la presentación de resultados del primer semestre. El grupo ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de que se encuentra en la "fase final de elaboración" de esa hoja de ruta, que debería guiar su actividad en solitario durante los próximos años.
El plan se conocerá una vez esté "finalizado y aprobado por el consejo de administración del Banco Sabadell previsto el próximo mes de julio", detalla el banco en una nota remitida al supervisor. La entidad ya adelantó hace meses su intención de presentar un nuevo plan estratégico que permita a los accionistas conocer sus planes de futuro antes de tener que decidir si aceptar o no la oferta del BBVA.
Sin embargo, el banco está esperando a hacerlo público hasta la recta final de la opa. El mismo presidente del Sabadell, Josep Oliu, ha señalado este mes que la idea es que la presentación del plan esté "lo más pegada posible al principio del periodo de canje", si finalmente el vasco sigue adelante con la operación.
El anuncio del banco catalán llega después de que el Gobierno indicara en la víspera que prohibirá una fusión entre el BBVA y el Sabadell al menos durante los tres primeros años de una eventual adquisición. Apelándose a criterios de interés general, el Consejo de Ministros endureció así las condiciones impuestas a la operación por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
La entidad acuñó su último plan plurianual para 2021-2023 después de incorporar a César González-Bueno como primer ejecutivo en sustitución de Jaime Guardiola y de que el nuevo consejero delegado impulsase una reorganización de negocio con foco en el cliente y la rentabilidad. En 2024 no volvió a fijar retos a largo plazo, aunque sí ha ido compartiendo "guías" financieras crecientes que han provocado ulteriores mejoras en las expectativas del mercado y analistas en beneficios, cotización y dividendos.
En los últimos trimestres, el banco ha ido sorprendiendo al mercado con unos resultados excelentes, superiores a las proyecciones compartidas por la propia entidad y por los analistas, tanto en términos de beneficio como en remuneración al accionista. Desde que BBVA lanzó su oferta, el vallesano elevó tres veces la cantidad para repartir a sus dueños, hasta alcanzar 3.400 millones de euros en el bienio 2024-2025.
El escudo del Sabadell contra BBVA tiene otro frente abierto: la posible venta de su filial británica TSB. La semana pasada anunció que recibió ofertas por parte de entidades terceras interesadas a su negocio británico, entre ellas Santander UK y Barclays, y que las irá evaluando. Al estar sujeto a una opa, el banco tiene que cumplir con el deber de pasividad, por lo que cualquier decisión sobre la venta de activos tiene que ser aprobada por una junta de accionistas, una cita que la entidad tiene que convocar con un mínimo de 30 días de antelación.
Esta operación sería estratégica para el grupo opado, ya que le permitiría elevar su exceso de capital en alrededor de 1.700 millones de euros adicionales, según los cálculos de varios analistas, y duplicar así su capacidad de remuneración al accionista. Poner sobre la mesa más dinero para ellos sería una manera para intentar seducirlos y asegurarse su apoyo en el tramo final de una batalla que dura ya más de un año.