Bizum suma etapas. La solución de pago inmediato a través del móvil de la banca ha desplegado la tecnología que permite a compañías, administraciones o instituciones domiciliar el cobro de los recibos con clientes, siempre que se pongan de acuerdo con su banco para implantar la prestación. La solución, bautizada como de suscripción, tiene las miras en poder domiciliar abonos como la contratación de plataformas de contenidos como Netflix, HBO Max o Amazon Prime Video, cobrar cuotas de colegios profesionales o de asociaciones de diversa índole, pero técnicamente permitiría la utilización por parte de empresas con recibos masivos según (telecos, compañías de agua, electricidad, etc) siempre que acuerden la adopción con su entidad financiera.
La función habilita el pago de suscripciones o abonos recurrentes con una fórmula donde el cliente final valida el cobro de tales pagos proporcionando su número de teléfono una única vez. La previsión de Bizum es que el próximo año aumente el número de comercios y servicios que ofrezcan esta modalidad, en el marco de la apuesta por cubrir el abanico completo de situaciones cotidianas donde se genere un pago.
27,5 millones de usuarios
En 2016 la banca se alió para lanzar Bizum, algo insólito en una industria que compite con ferocidad. Nació con foco en los micropagos en tiempo real entre particulares de cuenta a cuenta con sólo conocer el número de teléfono y sin necesidad de intercambiar datos como la numeración de las cuentas. Ocho años después tiene 70.000 comercios adheridos y 27,5 millones de usuarios que, desde su fundación, han realizado cerca de 3.300 millones de operaciones por un volumen que excede los 175.000 millones de euros.
Su hoja de ruta ha ido incorporando todas las situaciones y ámbitos de pagos, pero hasta ahora las facturas estaban más restringidas a la decisión del consumidor de abonar el recibo o, incluso, un impuesto uno a uno. El servicio de suscripción daría la vuelta, de alguna forma, al sistema con los adeudos del emisor de la factura, previa autorización del usuario, que así se garantiza el cargo directamente en cuenta sin el riesgo de incurrir en olvidos o retrasos.
En agenda inmediata tiene extender su actividad a los pagos presenciales a mediados de 2025 con la cartera digital Bizum Pay, que permitirá incorporar también tarjetas bancarias y operará con tecnología NFC (contactless).
Y uno de sus mayores desafíos y objetivos es convertirse en una modalidad de pago preferente más allá de España, en Europa. Bizum ha rodado ya una prueba de concepto junto a sus homólogos en Italia (Bancomat Pay) y Portugal (MBWay), cuya interoperabilidad de plataformas busca que cualquier usuario pueda realizar pagos paneuropeos en los diferentes sistemas y mercados.
Bizum está fomentando que otros mercados se sumen a España vía sistemas gemelos o con sus entidades financieras –en Andorra ha incorporado Morabanc, Andbank y Crèdit Andorrà–. Frente a la solución que comparte con la plataforma italiana y portuguesa compite Wero, la aplicación móvil de los principales bancos alemanes y franceses.
Las tres plataformas suman por encima de 43 millones de clientes (27,5 millones corresponden a Bizum). Su estrategia inmediata en 2025 será generalizar su aplicación en el pago entre personas en los tres países para incorporar posterior y paulatinamente otros casos de uso y territorios, incluso ajenos a la zona euro.