
Ningún analista duda de que la fusión entre BBVA y Banco Sabadell impactará de forma relevante el conjunto del tejido productivo catalán. Pimec se ha sumado a estos análisis con un informe que subraya la severa reducción que a su juicio se produciría sobre el crédito disponible y la red comercial del Sabadell si triunfara la OPA del banco vasco.
La patronal de pymes presidida por Antoni Cañete ha encargado este estudio a su think tank dirigido por Oriol Amat. Pimec ha elaborado distintos escenarios de futuro en base a los datos disponibles de fusiones bancarias anteriores, como la adquisición de Bankia por parte de CaixaBank o la integración entre Banco Popular y Banco Santander.
Por otro lado, la patronal ha aclarado que ya ha remitido su estudio a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que emitirá su propio informe sobre la operación entre octubre y noviembre.
Concentración del mercado
Retomando el posicionamiento de la Autoridad Catalana de la Competencia (ACCO), el primer organismo público que se ha pronunciado sobre los efectos de la fusión, Pimec advierte de la elevada concentración que se produciría sobre el sector financiero en Cataluña. Los dos principales grupos, CaixaBank y la entidad resultante entre BBVA-Sabadell, pasarían a controlar el 73,7% de las sucursales y el 72,03% del crédito empresarial.
"Esta situación afectaría negativamente tanto a las empresas, sobre todo las pymes, como a los consumidores, especialmente en zonas rurales donde la presencia de oficinas bancarias ya es limitada", recoge el documento.
Respecto al crédito disponible, la patronal estima que podría llegar a reducirse un 8%, lo que en términos absolutos se traduce en 54.393 millones de euros. Esto supondría una disminución del 30% del activo disponible del Banco Sabadell y del 1,3% del conjunto del sistema bancario español.
Este dato se ha calculado en base a los recortes producidos en fusiones anteriores como las de Santander-Popular (-19%), Unicaja-Liberbank (-2%) y CaixaBank-Bankia (-4%).
Se trata de una visión contrapuesta a la que el presidente de BBVA, Carlos Torres, comunicó en la reciente junta del grupo: "La entidad resultante tendrá una mayor capacidad de concesión de crédito para prestar a familias y empresas 5.000 millones de euros adicionales al año, contribuyendo al progreso económico y bienestar de la sociedad española".
Tijeretazo laboral
La suma de BBVA y Sabadell obligaría a reestructurar los activos de ambos grupos, como ha ocurrido en otros procesos similares. Esto supondría un achicamiento de su red comercial y su plantilla.
Basándose en el ahorro de 1.450 millones de euros anunciado por el propio BBVA, la patronal valora que podrían suprimirse entre 589 y 883 oficinas en toda España y entre 174 y 261 oficinas solo en Cataluña. Como consecuencia de ello, Pimec estima que la reducción potencial de ocupación se situaría entre 7.685 y 10.567 puestos.