
ING pide "prudencia" con el impuestazo al sector financiero para que este gravamen no desincentive la inversión extranjera en España. Así lo ha señalado este mismo martes su consejero delegado en España, Ignacio Juliá, durante el encuentro con periodistas que ha tenido lugar con motivo de su 25 aniversario. "No creemos que el impuesto a la banca sea el instrumento para facilitar el crecimiento de la economía, que es lo más importante para enfrentarnos al futuro", apuntó, recordando que "hay que ser prudentes" para que no desacelere la inversión en España. "Pediría que el impuesto no fuera permanente, sino que desapareciera", apuntó, alineándose con los planteamientos de la patronal del sector, la AEB.
Sobre el negocio en nuestro país, el directivo apuntó que en el primer trimestre del año se estaba viendo cierta recuperación en el nuevo crédito hipotecario tras el bajón que experimentó con la subida de tipos de interés.
En el lado de la remuneración del ahorro y de cara a lo que queda de año, Juliá apuntó que va a seguir retribuyendo el ahorro de sus clientes, ya que "está funcionado muy bien", llevándoles a crecimientos de doble dígito en el último ejercicio mientras el conjunto del sector iba a la baja.
25 años en España
La entidad naranja cumplió 25 años en España convirtiéndose en el quinto banco del país por número de cuentas, según sus propios datos. Así, pasó de tener 200.000 clientes en el año 2000 a más de 4,2 millones en la actualidad. Desde el año 1999, la entidad naranja ha concedido más de 300.000 hipotecas, dado financiación personal a más de 1,8 millones de proyectos y remunerado 4.785 millones en ahorro.
En 2023 ING superó los 1.000 millones en ingresos y los 450 millones de beneficio antes de impuestos, consiguiendo un ROE (return on equity) del 16%, por encima de la media del sector.