
Fin del conflicto laboral en las antiguas cajas de ahorros. Los sindicatos y CECA han suscrito un preacuerdo que garantiza a las plantillas del sector una revalorización salarial del 11,4% en tres años. Aplicará a los 55.000 empleados de los bancos fundados por las antiguas cajas de ahorros (CaixaBank, Unicaja, Abanca e Ibercaja Banco) y a la plantillas de Caixa Ontinyent, Caixa Pollença y Cecabank.
Se trata de la medina nuclear pactada este martes por CECA y la mayoría sindical y que ha permitido sellar un preacuerdo de convenio sectorial con vigencia para tres años después de meses de desencuentros. El pacto contempla un incremento salarial del 5% para el actual ejercicio y dos del 3% para el bienio 2025-2026 más una subida lineal para cada empleado de 1.000 euros durante este mismo ejercicio.
El preacuerdo ha sido rubricado por Fine, CCOO, UGT, CIC y CIG, que aglutinan más del 86% de la representación sindical del sector y que animaron a otras organizaciones sindicales a sumarse durante la negociación del texto del convenio que se abre ahora.
El convenio incorporará una cláusula de revisión salarial para garantizar una mejora adicional si el IPC superase la revalorización pactada, con un tope del 3% y que, de aplicarse, elevaría la revalorización de sueldos al 14% frente al 11,4% mínimo apuntado.
De forma adicional establece un día extra de libre disposición cada año de vigencia del convenio sin que se haya ampliado el horario ni eliminado la ayuda de estudios a hijos como planteaba la patronal, según detallaron los sindicatos al término del encuentro.
La CECA y las entidades que representa son las primeras en poner fin así a un conflicto laboral que amenazaba con huelga. Los sindicatos se enrocaron en restablecer el poder adquisitivo perdido por la escalada de la inflación y han convocado protestas, movilizaciones y hasta paros parciales en los últimos meses buscando mejoras en las ofertas en los tres convenios abiertos con CECA, la AEB y la patronal de las cajas rurales Unacc. En su calendario marcaron, de hecho, el próximo día 22 como fecha tope para acercar posturas o celebrar una huelga.
Las patronales arrancaron la negociación con ofertas del 5% para un convenio plurianual que habían subido al 7-8% en su última oferta para una vigencia de tres o cuatro años. Por su parte, los sindicatos exigían en las tres mesas (banca, ahorro y rurales) alzas de entre el 17% y el 23% a tres años.