
La investigación del 'caos Redsys' sigue una línea clara que conjuga la tecnología con el consumo masivo durante las ofertas del Black Friday. ¿Cómo se produjo la caída, por segunda vez consecutiva en apenas una semana, del sistema de pagos digitales que utilizan la mayor parte de los comercios y restaurantes de España y que dejó, con la cesta llena a muchos internautas que no pudieron llegar a pagar hasta horas depués?
"Estoy intentando comprar en Zara lo que tenía en la cesta y no va la tarjeta". Este es uno de los mensajes que en la noche del jueves al viernes, apenas unos minutos después de que el gigante de la moda Inditex terminase la cuenta atrás que llevaba a desbloquear las ofertas de su página web, se podía leer en muchos grupos de whatsapp o en las redes sociales desde diferentes lugares de toda España. Lo que nadie sospechaba entonces es que solo unas horas más tarde la investigación sobre qué pasó con Redsys este jueves por parte de diferentes autoridades centraba parte de su mirada en esa página web.
Fuentes al tanto de la investigación señalan a elEconomista.es que la principal línea en la que se trabaja tiene que ver con una denegación de servicio por un aluvión de bizums cuando el sistema ya tenía una altísima demanda como consecuencia de las decenas de miles de operaciones vinculadas a las compras del Black Friday.
¿Por qué un Bizum? Esta plataforma, que también estuvo sin servicio de forma intermitente durante los dos fallos de las últimas semanas, está vinculada con Redsys. Como todo usuario de la plataforma de pagos instantáneos sabe, a la hora de enviar un Bizum, se solicita el número de teléfono y el sistema te da el nombre del destinatario y las iniciales de los dos apellidos del cliente en cuestión. De esta forma, hay una doble petición de información al servidor que, ante un aluvión de solicitudes, puede llegar a colapsarlo. Más si cabe, en un momento en que Redsys ya estaba trabajando a máxima capacidad como consecuencia de las compras online típicas de un momento como el Black Friday.
Redsys afirma que la incidencia del pasado sábado afectó al 2,5% de las operaciones electrónicas de pagos realizados ese día en España, y la de este jueves, la que la investigación relaciona con el Black Friday y el aluvión de bizums, al 1,7%. Estas cifras pueden parecer pequeñas, pero es necesario que se pongan en relación con el momento concreto en que suceden, sobre todo en el caso de la última.
El gasto medio por persona para el Black Friday de este año se calculó, según diversas fuentes, en el entorno de los 237 euros, y las encuestas previas a esta celebración señalaban que nueve de cada diez consumidores realizarían compras en este periodo. Por ello, la inadmisión del método de pago en un 1,7% de las operaciones en una fecha como esta puede suponer un perjuicio para el comercio y para la reputación de las marcas y las entidades financieras millonario.
La plataforma Redsys señaló en un comunicado emitido ayer que ambas incidencias han sido "puntuales, fortuitas e independientes entre sí" y defendió que es "la primera vez" que sucede un hecho así en los cerca de 12 años que la empresa lleva operando este servicio en España.
Las fuentes al tanto de la investigación iniciada por las diferentes autoridades admiten que, sobre esta línea de seguimiento, varios DPOs (Data Protection Officers) están investigando cuestiones relacionadas con este caso.