
La escalada del euríbor, impulsado por la subida de tipos de interés, se ha traslado con celeridad a los ingresos de los bancos. El rendimiento que obtienen las entidades por su negocio más típico con clientes, es decir, la diferencia entre los intereses cobrados por los créditos menos el coste por remunerar los depósitos, se ha disparado más de un 66% en apenas un año y roza el 82% desde que el euríbor tocó mínimos en 2021, situándose al cierre del pasado septiembre alrededor del 3,14%.
CaixaBank, seguido por Santander España y BBVA, son las entidades que más han ensanchado la rentabilidad por cliente en nuestro país por contar con mayor cartera hipotecaria o no haber entrado en contiendas de remuneración del pasivo.
El diferencial de la clientela de CaixaBank cerró septiembre en el 3,52%, 1,91 puntos porcentuales por encima del 1,61% contabilizado al cierre de 2021 cuando el euríbor cotizaba en su suelo histórico del -0,502% y era difícil pronosticar la subida de tipos aplicada por el Banco Central Europeo (BCE) para doblegar la inflación.
El Santander en España escala dicho margen desde el 1,63% al 3,37% (+1,74 puntos porcentuales) en el mismo periodo y en BBVA España pasa del 1,73% al 3,33% (+1,60). De los bancos cotizados, continúan esta evolución Unicaja, donde su margen avanza desde el 1,35% al 2,61% (+1,26), Bankinter, con una remontada desde el 1,82 al 3,03% (+1,21), y Sabadell, cuyo diferencial con la clientela se incrementa al 2,99% desde el 2,23% de 2021 (+0,76 puntos porcentuales).
Para esta comparativa se aíslan en Santander y BBVA los mercados exteriores porque la política monetaria en otras geografías difiere, con tasas que nada tienen que ver que ver con las del BCE y repercuten de manera diferente en el crédito y los depósitos, penalizando, incluso, las subidas de tipos en algunos mercados porque se trasladan antes al ahorro que a la financiación.
El diferencial con clientes ha recuperado un umbral que no se veía desde 2008 o 2010 y casi duplica el 1,73% de finales de 2021, cuando la contienda estaba en prestar para captar clientes y ganar negocio. Esa guerra bajó los precios de la financiación a cotas mínimas con el euríbor en negativo (sólo un año antes el margen de clientes rozaba el 1,88%). Por entonces, no había nada de presión en la parte del pasivo y todavía hoy continúan sin llegar las ofertas generalizadas al conjunto de la banca.
A finales de septiembre, la remuneración de depósitos oscilaba entre el 1,09% de Bankinter y el 0,47% en Unicaja frente a una retribución nula con los tipos negativos y cobrando, incluso, recargos a los clientes institucionales y empresas por custodiar su liquidez. Las ofertas de la gran banca siguen limitadas a empresas y clientes de mayor patrimonio, y con ofertas alternativas de fondos o planes de pensiones para el ahorro a largo plazo del particular.
Santander España declara un coste en depósitos del 0,90% en septiembre pasado, Sabadell lo eleva al 1,02%, CaixaBank del 0,71% y BBVA del 0,68%. El mayor rendimiento del crédito corresponde a su vez a Santander (4,27%), junto a CaixaBank (4,23%) y Bankinter (4,12%). En BBVA y Sabadell se situaba en el 4,01% y el 3,09% en Unicaja.