Unicaja sufre otra baja en su consejo de administración. El dominical Manuel Muela Martín-Buitrago ha presentado su renuncia al cargo, aunque será efectiva en la próxima junta general ordinaria del banco una vez cerradas las cuentas de 2022, pero sin esperarse a ella por su oposición a su relevo.
En su escrito y según Unicaja, "justifica la renuncia en su discrepancia con el proceso que se sigue para su sustitución como consejero, teniendo mandato vigente, y la posición del supervisor en dicho proceso".
Manuel es uno de los cuatro consejeros que quiere sustituir la Fundación Unicaja, principal accionista del banco, por pérdida de confianza en ellos. Se trata de la segunda baja, ya que Juan Fraile presentó su renuncia en Navidad, al conocer que sería relevado, y se mantienen Teresa Sáez y Petra Mateos.
Para sustituir a Fraile la Fundación ha propuesto a Miguel González Moreno, y sus tres candidatos restantes son Juan Antonio Izaguirre Ventosa, Natalia Sánchez Romero y José Ramón Sánchez Serrano como nuevos dominicales, en representación de sus intereses.
El origen de la confrontación se remonta a la fusión con Liberbank y el incumplimiento, según esgrime la Fundación, de los pactos de fusión con la toma de algunas decisiones.
El primer abandono fue el de Manuel Conthe que, el 15 de febrero de 2022, presentó su dimisión como consejero independiente por disconformidad con la intención de reforzar la cuota de dominicales.
Desde entonces se han producido nueve salidas, entre las que figuran dos consejeras que presidían además la Comisión de Nombramientos del banco, un órgano particularmente involucrado en estos proceso y en el proceso pactado en la fusión de despojar de la función ejecutiva el presidente (Manuel Azuaga) y evaluar al consejero delegado (Manuel Menéndez).
Esta inestabilidad ha provocado que el Banco Central Europeo (BCE) haya abierto un estudio del gobierno corporativo de la entidad hace meses.
