
En España hay más de 3.300.000 autónomos en el año 2022, de acuerdo con los datos del Ministerio de Trabajo. Con la actual inflación disparada al 8,9%, las subidas de precios correspondientes son dañinas para los negocios de estos trabajadores. Para ellos, existen ciertas cuentas de bancos que pueden minimizar el impacto de la inflación en sus finanzas personales.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha recogido varios consejos para ayudar al trabajador autónomo a elegir los depósitos que más se adecúan a su negocio.
Características aconsejables
De acuerdo con la organización privada y sin ánimo de lucro, los autónomos interesados en cambiar de entidad bancaria deberían conseguir estas características:
-La posibilidad de realizar transferencias gratuitas.
-Acceso a programas de financiación y seguros de salud para sus trabajadores, con condiciones ventajosas que para otros clientes.
-Posibilidad de domiciliar recibos.
-Poseer tarjetas de crédito y de débito sin comisión de mantenimiento.
-Posibilidad de utilizar datáfono y de pago de nóminas a empleados.
Si, por el contrario, el trabajador en cuestión no posee necesidades específicas ni gente a su cargo, entonces la OCU le recomienda abrirse una cuenta corriente para particulares.
Cubrir más necesidades
Si el trabajador autónomo requiere la cobertura de otras necesidades, la organización le aconseja una cuenta que remunere saldos o devuelva parte de los recibos. Así podrá compensar posibles gastos.
Un ejemplo de depósito recomendado por la misma es la Cuenta Profesional de Bankinter, con un 5% TAE durante el primer año y un 2% TAE el segundo, para los 5.000 primeros euros de la cuenta. Esta tiene, además, la peculiaridad de que es gratuita si se ingresan 800 euros mensuales, si se activa la tarjeta Combo y si se pagan tres recibos de manera trimestral.
La OCU también recomienda para el autónomo las cuentas que se gestionan de manera exclusiva con aplicaciones online. Estas son gratuitas y no poseen requisitos, como es el caso de Revolut y su Revolut Business Plan Free. Este paquete básico incluye acceso para diferentes empleados, una aplicación para aceptar pagos en la web, o la posibilidad de pagar gratis a particulares, entre otras. Pagando 25 o 100 euros al mes, puede realizarse una ampliación de la cuenta en la que se incluyen pagos gratuitos extranjeros y nacionales, entre otras ventajas.
¿Cuáles son los gastos a soportar?
Aunque los requisitos que un autónomo debe cumplir para abrir un depósito sean característicos de cada banco, algunos sí concuerdan en buena parte de las cuentas. Destacan aquellos para librarse de costes de mantenimiento, que podrían superar los 200 euros anuales.
Entre estos requisitos comunes destacan:
-Mantener un saldo mínimo o poseer ingresos periódicos. Algunos ejemplos son los 1.500 euros de la cuenta negocios profesionales de Ibercaja, o los menos de 200.000 euros que pide de media BBVA para que su cuenta sea gratuita.
-Domiciliación de pagos. Esto incluye las nóminas de los empleados, o las cotizaciones a la Seguridad Social, entre varios más.
-(Normalmente) piden también que se lleve a cabo un mínimo de movimientos con la tarjeta de crédito o débito. El depósito de Santander obliga a 6 pagos trimestrales con tarjeta, o Kutxabank y Unicaja piden 1.200 euros de gasto anuales.