
VidaCaixa, la filial de seguros de vida de CaixaBank, obtuvo un beneficio neto consolidado de 388,7 millones de euros entre enero y junio, cifra que representa un aumento interanual del 7% y que atribuyó al crecimiento "sostenido" de los recursos gestionados y el mayor volumen en las carteras de negocio y ahorro. Su actividad comercial retornó a cotas "similares" a las pre-Covid, con 5.512,1 millones en primas y aportaciones, lo que supone un 3,5% más que el pasado año y un 0,4% superior a las cifras comparables de 2019.
El mayor volumen, un 84% del total, corresponde al negocio de ahorro, donde creció un 30% en rentas vitalicias y unit linked; mientras que en vida-riesgo avanzó un 27,2% en el segmento de protección individual.
Por su parte, los recursos gestionados por VidaCaixa aumentaron un 4% y alcanzaron los 113.586 millones, de los 65.301 millones corresponden a seguros de vida y 4.317 millones los aportó Bankia Vida, cuya integración completará en el último trimestre del año. La aseguradora de vida y pensiones de BPI, filial portuguesa de CaixaBank, aportó otros 7.444 millones.
Según la compañía, estas cifras consolidan su liderazgo en el negocio de vida, con un 34% de la cuota de mercado en volumen de provisiones, y con otro 34% en el ahorro gestionado en planes de pensiones.
En términos de Solvencia II, su ratio de recursos propios sobre el capital requerido ascendió al 160%.
Por productos, los seguros de ahorro concentraron gran parte del volumen de primas comercializadas, con 3.560,7 millones en el segmento individual (+8,7%) y 389,8 millones de euros en el colectivo (+2,1%).
En planes de pensiones, las aportaciones se situaron en 862 millones de euros, con un descenso interanual del 14,2% que VidaCaixa atribuyó a la caída de los mercados, que ha impactado en las valorizaciones y las rentabilidades, y una disminución de las aportaciones tras rebajar el Gobierno el umbral de aportaciones deducibles.
En concreto, las aportaciones a productos individuales cayeron un 13,5%, hasta 562,7 millones; y en los de empleo retrocedieron un 15,5%, hasta 299,3 millones, pero en su caso por comparar con un 2021 donde hubo aportaciones extraordinarias en BPI Vida e Pensões.