El conflicto por colonizar territorios en la Tierra ya les quedó pequeño a las grandes potencias desde la Guerra Fría. La carrera espacial entre Estados Unidos y la Unión Soviética por ver quién llegaba antes a la Luna se produjo en un contexto de máxima tensión entre los dos países. El hombre llegó al esteroide y desde entonces, el objetivo es habitar otros planetas y extraer recursos de la Luna. Un reto que ha reavivado la confrontación, en la que ha aparecido un nuevo actor: China.
