Tomás de la Rosa
A seis semanas para elegir gobernador en el Estado de México, el laboratorio electoral rumbo al relevo presidencial en 2018, la captura de los exgobernadores Javier Duarte y Tomás Yarrington Ruvalcaba de una decena de exmandatarios estatales de todos los colores rojos (PRI), azules (PAN) y amarillos (PRD) corrobora la similitud de la política mexicana con la Ley de Conservación de la Materia para quedar en "la corrupción, ni se crea ni se destruye, sólo se transforma".