La Fábrica de Munición de Granada, del grupo eslovaco MSM, compra el antiguo polvorín militar de Vadollano en Linares, donde prevé un centro de producción con un centenar de puestos de trabajo a corto y medio plazo. Las instalaciones del Ejército llevaban abandonadas desde 2012, y su recuperación se suma a la resurrección industrial de la ciudad, que tras años liderando tasas de paro a nivel nacional está atrayendo proyectos industriales de todo tipo.

Delegado en Andalucía de elEconomista