¿Te imaginas un hotel especializado en estimular y agradar a tus cinco sentidos? No se trata de unas suaves sábanas de seda, ni de unos pasillos aromatizados o un buffet repleto de salmón, aguacate o pain au chocolat. Es más. La idea es enseñar al cliente a sentir de forma diferente: vista, olfato, gusto, oído y tacto mezclados en una misma experiencia. Y todo en la playa de Valdevaqueros, en las cosas de Tarifa.