En el centro John Garret, de la Quinta Avenida de Nueva York
La que fuera Primera Dama de la Casa Blanca sabe que una imagen vale más que mil palabras, por eso cuida la suya al milímetro. Hace unos días, Hillary Clinton acudió a un famosísimo salón de belleza situado en el centro de Nueva York para cortarse las puntas por 600 dólares.